Asimismo, informes privados aseguran que el uso de efectivo para los gastos del día a día disminuyó después de la pandemia a favor de los métodos de pago digitales: 25% de los encuestados reportaron que, antes de la crisis sanitaria, pagaban más del 75% de sus gastos mensuales con dinero en efectivo. En 2023, esta proporción se ha reducido a un sorprendente 15%.
Pagos digitales e inclusión financiera
En paralelo, el crecimiento de los pagos electrónicos promueve la inclusión financiera, lo cual trae numerosas ventajas para los consumidores y los comercios.
Según dicho informe, en 2023, después de casi tres años de vivir los impactos de la pandemia, el número de consumidores que sólo usan efectivo (aquellos que no tienen una cuenta financiera) se redujo drásticamente de un 45% a tan sólo un 21%, lo que equivale a la inclusión de más de 115 millones de personas.
“Dado que la penetración de los teléfonos inteligentes en la región es inminente, muchas de las actividades cotidianas de las personas son realizadas a través de dispositivos móviles, los cuales se han convertido en el nuevo estándar para pagos”, dijo Martín Malievac, director de Investigación y Desarrollo de Napse.
Además, destacó, “las transacciones digitales tomaron la delantera debido a que permiten abonar cualquier producto o servicio con comodidad y practicidad, más allá del crecimiento del comercio electrónico, que se consolidó como uno de los canales de compra venta más utilizados”.
En este sentido, aseguró el especialista, “contar con soluciones que optimicen la experiencia de pago desde cualquier canal, evitando inconvenientes o demoras durante el proceso es fundamental para garantizar buenos resultados durante la compra”.
Billeteras digitales: qué pasa en los comercios
Bajo un esquema hiperdigitalizado, los retailers deben estar a la vanguardia de las tendencias tecnológicas que facilitan e integran la gestión diaria de los negocios.
Al respecto, el comercio unificado cobra especial relevancia, un concepto que está ganando popularidad y es clave para el éxito a largo plazo. El gran diferencial de su implementación, es que ofrece la capacidad de gestionar cada etapa del recorrido del cliente, desde la búsqueda hasta la compra, en un único sistema, lo que permite reducir costos y aumentar la eficiencia a lo largo de todo el ciclo de ventas del comercio electrónico.
De esta manera, todos los canales de venta y los procesos empresariales -como gestión de inventario, procesamiento de pedidos, envíos, etc.- están integrados en un mismo lugar, favoreciendo en gran medida la experiencia del consumidor, un factor esencial en la decisión de compra.