Luis Enrique, exentrenador del Barcelona y de la Selección española de fútbol, confirmó mediante un comunicado en Twitter el motivo por el cual se vio obligado a dejar su cargo: su hija Xana, de 9 años, estaba afectada por un osteosarcoma por el que, finalmente, murió. En el mensaje agradece las muestras de apoyo y la discreción con la que se llevaba el asunto por quienes ya lo conocían.