El nuevo mandatario electo asumirá el cargo el próximo 8 de noviembre para el período 2025-2030.
Deberá enfrentar una economía debilitada, marcada por la escasez de combustibles, el déficit fiscal y una prolongada falta de divisas por la merma de las reservas internacionales netas (RIN).
Bolivia atraviesa un momento de transición política tras un ciclo de 20 años bajo la influencia del Movimiento al Socialismo (MAS).
Repercusiones de las elecciones en Bolivia
El primero en reaccionar al resultado fue el candidato a vicepresidente, Edmand Lara, quien en la puerta de su domicilio agradeció por la confianza de los bolivianos y emitió un mensaje de conciliación. “Hoy el pueblo nos da la oportunidad de gobernar Bolivia para todos, llamo a la unidad y a la reconciliación de los bolivianos”, manifestó. “Se acabó la campaña política, hay que trabajar por Bolivia, la patria está primero”, agregó.
Al reconocer su derrota, Quiroga manifestó que llamó al presidente electo para expresarle sus felicitaciones y descartó indicios de fraude en la votación. “Entiendo el dolor que nos embarga, créanme que si tuviéramos una evidencia sistémica (de fraude) la pondríamos sobre la mesa”, afirmó. El ex presidente agradeció a su equipo y manifestó que “le duele no poder hacer por Bolivia lo que Bolivia merece”.