El viagra, la famosa pastilla azul, se utiliza en todo el mundo para ayudar a personas que tienen disfunción eréctil. Al tratarse de un vasodilatador (sildenafil es el nombre de la droga), ayuda a quienes tienen ese tipo de problema.
Investigadores norteamericanos realizaron un estudio con personas con disfunción eréctil que recibieron sildenafil. El resultado fue sorprendente.
El viagra, la famosa pastilla azul, se utiliza en todo el mundo para ayudar a personas que tienen disfunción eréctil. Al tratarse de un vasodilatador (sildenafil es el nombre de la droga), ayuda a quienes tienen ese tipo de problema.
Pero ahora, investigadores publicaron un trabajo en la revista especializada Neurology en el que dicen haber hallado una sorprendente relación adicional que puede ser muy útil para tratar una dura enfermedad irreversible: el Alzheimer.
El trabajo se hizo con unas 270.000 personas (entre el año 2000 y 2017) que tenían como diagnóstico algún grado de disfunción eréctil. Se los trató con sildenafil, pero con una particularidad: un grupo no recibió la "pastilla azul", sino que se le suministró otro medicamento. El estudio surgió a partir de una asociación hecha con las propiedades del fármaco y su posible acción en el flujo sanguíneo en el cerebro.
El sildenafil está entre el grupo de los medicamentos que inhiben la fosfodiesterasa, una enzima que modifica el flujo sanguíneo. Cuando se investigaba casos de hipertensión o de angina de pecho se vio que al ser un vasodilatador, tenía un efecto favorable en personas con esa disfunción eréctil. Se dejó su investigación es ese campo y se lo comercializó como viagra (por Pfizer) para tratar este tema en los hombres.
Los científicos retomaron esa capacidad de inhibir a la fosfodiesterasa y se preguntaron si al mejorar el flujo sanguíneo podría resultar en una mejora de la alimentación de sangre al cerebro, que evite daños progresivos que puedan desencadenar, por ejemplo, la enfermedad de Alzheimer.
Los científicos destacaron que en el caso de quienes recibieron de manera metódica "pastilla azul", con el paso de los años tuvieron un 18% menos de probabilidades de desarrollar Alzheimer. La enfermedad se asocia a varios factores, como la predisposición genética, el entorno, los hábitos alimenticios y el estado de salud general que se potencia con la edad.
En este trabajo, los investigadores creen que el hecho de haber mantenido en el tiempo una mejor oxigenación cerebral preservó la calidad neuronal y evitó o retrasó la aparición de esa enfermedad degenerativa.
Se calcula que la demencia por todas las causas afecta a 57 millones de personas en todo el mundo y se prevé que los casos aumenten a 157 millones para 2050.
Se especifica que "los hallazgos de este gran estudio poblacional sugieren que el uso de este fármaco puede estar asociado con un riesgo reducido de incidencia del Alzheimer". También dice que cuanto más tiempo se mantuvo la aplicación de la medicación, mejor fue el resultado.
"Encontramos que, en comparación con los que no lo utilizaron, aquellos que recibieron el sildenafil tuvieron un riesgo reducido de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. No obstante, es apenas un estudio inicial que debe ser corroborado con más trabajos similares. Aunque es una señal auspiciosa.