Está a punto de cumplir un mes internado en la Clínica Gemelli de Roma. Superó varias etapas sumamente críticas y en lo que va de la semana muestra una leve, pero positiva, evolución en su estado que sigue siendo crítico.
El nuevo parte médico sobre el papa Francisco da cuenta de un nuevo avance en su recuperación. (Foto: gentileza Milanoeventes)
El Papa sigue mejorando, pero los médicos se muestran cautelosos. El nuevo parte dice que se analiza que su recuperación puede permitir que ya no dependa de una máscara de oxígeno para respirar. Una señal más que alentadora tras la doble neumonía que lo afectó seriamente en los días que siguieron a su internación decidida el 14 de febrero pasado.
Esta leve evolución permitió que se le vuelvan a colocar cánulas nasales que insuflan oxígeno durante el día, aunque ya no es necesario un suplemento mayor como el que proporciona una máscara. El próximo paso, de continuar esta recuperación, será cortar o reducir al mínimo el suplemento de oxígeno durante la noche.
El Papa Francisco lleva al menos tres noches consecutivas en las que durmió con tranquilidad y sin sobresaltos para los médicos.
El Santo Pontífice no deja de recibir muestras de cariño y apoyo de todo tipo. Se mostró especialmente agradecido a una serie de dibujos y mensajes que recibió por parte de niños que están hospitalizados en el hospital romano "Bambino Gesú". (El Niño Jesús). Los médicos recuerdan que se mantiene su estado crítico, aunque su pronóstico desde el día lunes ya no es reservado.
Desde el fin de semana, las noticias sobre el papa Francisco permiten ser optimistas, aunque con suma cautela. Su estado sigue siendo crítico, ya que aún no ha desaparecido la neumonía bilateral que obligó a su internación. Pero su situación ya ha dejado de ser "reservada" y el último tratamiento que se le está aplicando va marcando progresos importantes día tras día. A las noches tranquilas para un buen descanso se suma ahora la posibilidad de no tener que utilizar la máscara de oxígeno para ayudarlo a respirar. Ahora tiene una cánula que le envía oxígeno por sus fosas nasales, pero es un procedimiento que habla de una mejor capacidad del papa para respirar por sí mismo.
En concreto, se mantiene “fuera de peligro inminente por la infección de las vías respiratorias con la que ingresó al hospital”, aunque los médicos advierten, que como todavía no superó la neumonía, debido a sus 88 años y las patologías precedentes deberá quedarse internado varios días más, por lo que superara el mes en la clínica Gemmelli de Roma.
En resumen, la sala de prensa vaticana confirmó lo siguiente. “Sus condiciones aparecen estables y en leve mejora y aunque salió del pronóstico reservado, para los médicos el cuadro clínico permanece complejo”.
