edit deletephotoLos médicos tuvieron que realizarle una cesárea de emergencia ante la gravedad de su situación y no pudo superar la enfermedad.
Una mujer de 30 años murió de coronavirus en la unidad de cuidados intensivos después de dar a luz a su hijo mediante una cesárea de emergencia. Como estaba embarazada, Natalie Forshaw decidió no vacunarse contra la enfermedad al temer por la salud de su hijo.
La joven inglesa, que dio a luz el día 3 de noviembre, comenzó a sentirse mal cuando se encontraba en casa, antes de dar a luz a su hijo en el Hospital general de Manchester, Royal Infirmary.
En el transcurso de ese mes, le descubrieron un coágulo en el corazón que se rompió y se trasladó a sus pulmones, dejando a la madre en una situación crítica
Luego de dar a luz a su pequeño hijo Caleb, fue trasladada a la unidad cuidados intensivos e inducida a un coma después de dar positivo en coronavirus. Natalie no pudo ver a su hijo recién nacido hasta una semana más tarde.
"Como estaba embarazada, la llevamos al médico y sus niveles de oxígeno eran muy bajos. Tenía un dolor muy fuerte en el pecho", explica su madre, Bernie Wilton, al diario británico The Daily Mail. "Fue al hospital y dio a luz pero Natalie fue transferida a cuidados intensivos".
Su madre Wilton y el padre de su hijo, Jay Hurst, solo podían verla durante 10 o 15 minutos cada día en la unidad de cuidados intensivos pero la situación poco a poco fue siendo cada vez más grave.
El día 6 de diciembre, su situación se había deteriorado tanto que los médicos informaron a la familia de que no podían hacer nada por su vida. Pero, menos de una semana después, Natalie mostró signos de mejora que levantaron una breve esperanza.
"Estaba sentada con ella y empezó a pestañear, está empezando a despertarse... y cuando le hablé del pequeño Caleb se echó a llorar... todas las enfermeras empezaron a aplaudir, está muy felices por ella. Ella está siendo tan querida... está luchando", escribía su madre en sus perfiles de redes sociales.
Sin embargo, Natalie empeoró el 20 de diciembre, cuando su corazón volvió a fallar y tuvieron que sedarla completamente de nuevo. Seis días más tarde, el 26 de diciembre, su madre volvió a escribir en sus redes para confirmar que Natalie había perdido la batalla.
