Las fotos de la fiesta celeste y blanca: jugadores e hinchas festejan la copa del mundo en el amistoso contra Panamá
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Una multitud celebra la consagración de la Selección argentina en el Mundial de Qatar 2022 en el estadio Monumental, a la espera del partido amistoso entre el conjunto albiceleste y Panamá, en una jornada repleta de música en el barrio porteño de Núñez.
Con Lionel Messi como símbolo, el equipo logró una simbiosis muy fuerte con el hincha. La demostración se hizo patente hace días cuando el crack rosarino congregó a miles de fanáticos en la puerta de un restaurante del barrio porteño de Palermo.
Y la fiesta del Monumental, para celebrar "en casa" la gloria mundial, reafirmó que esta selección logró que los colores celeste y blanco predominen de manera abrumadora.
Los volantes Rodrigo De Paul y Leandro Paredes salieron a la cancha del estadio de River Plate, como parte del habitual reconocimiento de campo, y mantuvieron "la cábala de los caramelos" antes del partido.
De Paul y Paredes aparecieron antes de las 19, momento en que el dúo de cumbia La T y La M brindaban su show desde la tribuna Belgrano Baja Inferior, y generaron un estadillo entre los miles de hinchas que coparon el Más Monumental.
Ambos, con la ropa de entrenamiento, se dirigieron al centro de la cancha y una vez allí empezaron a degustar caramelos. Esta práctica se hizo habitual hace tiempo en la Scaloneta y fue una fija durante la Copa del Mundo de Qatar 2022.
A veces acompañados por Alejandro "Papu" Gómez, hoy ausente por lesión, y otras por el utilero Mario De Stéfano, De Paul y Paredes mantuvieron la cábala aún en un amistoso, que sirvió como gran excusa para la fiesta con los hinchas.
Los campeones del mundo se quedaron varios minutos contemplando la fiesta en las tribunas. Los hinchas entonaron la canción "Muchachos", se pusieron efusivos al unísono con el grito: "¡El que no salta es un inglés!" y despidieron a los jugadores con: "¡Argentina, Argentina!".
Con la presencia del DJ Fer Palacios, el primero en hacer el calentamiento, con baile incluido a pedido de la gente, fue Emiliano "Dibu" Martínez, mientras que a los pocos minutos apareció el resto de los jugadores y la hinchada se rindió a lo pies del astro Lionel Messi, quien no fue el único de su familia ovacionado dado que antes pisaron el campo sus tres hijos, Thiago, Mateo y Ciro, junto a la esposa de la "Pulga", Antonela Roccuzzo, y los seres queridos de los demás protagonistas.