Las averiguaciones comenzaron cuando personal policial recibieron las denuncias en enero pasado de dos entraderas ocurridas en los barrios porteños de Caballito y Belgrano, con tres delincuentes como protagonistas.
El primer hecho se dio en la calle La Pampa al 2.200, donde dos ladrones se hicieron pasar por carteros y llamaron a una vivienda. La propietaria les abrió la puerta y fue sorprendida a punta de pistola por los delincuentes, que le sustrajeron dinero, joyas y un teléfono celular.
Mientras esto ocurría, un vecino escuchó ruidos sospechosos y advirtió a un oficial de la Comisaría Vecinal 13 B que se encontraba en la zona. El efectivo acudió a la propiedad y allí, tras presentarse como policía, forcejeó con los hombres y le robaron el arma reglamentaria para luego darse a la fuga, en un automóvil Peugeot 2008 blanco que los estaba esperando con un hombre al volante.
Un día después, se tomó conocimiento de una entradera ocurrida en la calle Aranguren al 1.400, en Caballito. La víctima, una médica colombiana, fue sorprendida en la puerta del edificio por dos delincuentes, que la hicieron ingresar a su departamento y le sustrajeron objetos de valor.
Por medio del levantamiento de rastros en la vivienda de Belgrano por parte de la Policía Científica, se identificó con una huella dactilar a uno de los ladrones, que tenía antecedentes por robo, y se hizo un análisis de cámaras de la zona, redes sociales y registros de la CNRT.
Las muestras permitieron observar a los autores y confirmar que habían utilizado en ambos casos el mismo automóvil Peugeot 2008. Por medio de la patente del rodado y de una cédula de autorización para su uso, se constató la identidad del conductor, otro de los involucrados.
Desde el juzgado interviniente ordenó los procedimientos en los domicilios de los delincuentes en Venezuela al 3.500 y Pavón al 3.300, en Ciudad de Buenos Aires, y el restante en Dock Sud, ubicaciones que se lograron obtener mediante la investigación.
Los oficiales, antes de allanar la propiedad de la calle Venezuela, detuvieron a uno de los ladrones, el líder y que tenía una discapacidad visual, y le secuestraron los dos celulares que llevaba encima. Luego ingresaron a la casa e incautaron dos dispositivos más.
En Pavón al 3.300, los efectivos no encontraron al ladrón, pero hallaron una pistola calibre 40, dos pistolas 9mm, una pistola calibre 635, un revólver calibre 357, 400 cartuchos, 11.000 pesos, 78 dólares, tres computadoras, credenciales de legítimo usuario, portación y tenencia de arma de guerra, llaves y un equipo de telefonía.
Además, en Dock Sud, en el Pasaje Homero al 1600, se detuvo al segundo de los delincuentes identificados en los robos y se le incautó un teléfono celular.
La investigación continuó y por medio de un seguimiento del dominio del Peugeot 2008, se corroboró que se había vendido a una persona residente en la ciudad de Caseros. Allí, los efectivos encontraron el rodado estacionado en la vía pública, en Cerro Juncal al 3.000, y lo secuestraron.
Los detenidos fueron alojados en Alcaidías de la Policía de la Ciudad y quedaron a disposición de la Justicia.