El padre de uno de los ocho rugbiers acusados de asesinar a Fernando Báez Sosa rompió el silencio esta semana y salió a defender a su hijo, Lucas Pertossi, a quien calificó como un chico “que vive feliz con las cosas que hace”.
El padre de uno de los ocho rugbiers acusados de asesinar a Fernando Báez Sosa rompió el silencio esta semana y salió a defender a su hijo, Lucas Pertossi, a quien calificó como un chico “que vive feliz con las cosas que hace”.
“Él no mató a nadie”, aseguró Marcos Pertossi, padre de Lucas, en declaraciones al noticiero Telenoche. “Él no tiene nada que ver con esto. No es ni asesino ni es malo”, agregó en otro segmento de la entrevista en relación a la muerte de Fernando Báez Sosa.
Lucas Pertossi se encuentra detenido junto al resto de los rugbiers acusados del asesinato en el Pabellón 3 de la Alcaidía de la localidad platense de Melchor Romero.
Los investigadores creen que fue el camarógrafo del grupo ya que solía filmar todos los ataques de la patota. En rigor, fue él quien registró el comienzo de la agresión de Fernando Báez Sosa. “El no tiene malas intenciones. Es un chico que vive feliz con las cosas que hace”, recalcó Marcos Pertossi con respecto a su hijo.
El crimen de Fernando Báez Sosa ocurrió la madrugada del 18 de enero de 2020, cuando fue atacado a patadas y trompadas por un grupo de jóvenes a la salida del boliche "Le Brique", en pleno centro de Villa Gesell.
Tras el asesinato, Lucas les contó a sus amigos a través de un mensaje lo que había pasado. El joven mandó un mensaje de Whatsapp a pocos metros de la escena, a donde regresó minutos después del crimen.
"Amigo, estoy acá cerca de donde está el pibe y están todos a los gritos", se le escucha decir en uno de los audios de ese día. "Está la policía, llamaron a la ambulancia", decía otro texto, y, sobre Fernando Báez Sosa, remataba: "Caducó”. Poco después, se lo vio comiendo una hamburguesa junto a Thomsen en un McDonald's.