La impotencia y la esperanza de una madre
Cada minuto sin noticias acentúa el sufrimiento de Claudina, quien, a pesar de su dolor, elige la prudencia al hablar del avance de la investigación. “Sospechas tengo 500 mil, pero no puedo andar vociferando todo lo que pienso”, confesó, reflejando la tensión que la acompaña. “Hay que actuar sobre lo que tenemos, y lo que tenemos es nada o muy poco”, agregó, mostrando su desesperación por la falta de pistas.
Aun en su angustia, destacó el trabajo del fiscal Carlos Ortigoza, aunque enfatizó la necesidad de testigos: “La Justicia está trabajando, pero si no hay nadie que hable, nadie que haya visto algo... dónde la vamos a ir a buscar”. Claudina concluyó con un llamado a la solidaridad de todos: “Estamos todos desesperados. Necesitamos que la gente colabore, que la cara de Sofía esté en todos lados. Hoy es mi hija, mañana puede ser cualquiera”.
Detalles de la desaparición
Sofía Delgado fue vista por última vez el 30 de octubre, cerca de las 23 horas, cuando salió de su casa en San Lorenzo, Santa Fe, para ir al kiosco y nunca volvió. “Solo se llevó una riñonera con el celular”, precisó Sofía Borletto, abogada de la familia.
El celular de la joven, ahora apagado, emitió señal en San Lorenzo y luego en Puerto General San Martín, sin resultados favorables tras la revisión de cámaras de seguridad. Antes de que el dispositivo se desconectara, Sofía envió un mensaje a su pareja, Lázaro Romero, cuya coartada fue verificada por el fiscal, sin hallarse vínculos con la desaparición.