Córdoba

"Me estoy muriendo": las desgarradoras últimas palabras del playero asesinado en Córdoba

Pablo Altamirano, de 36 años, fue asesinado en una estación de servicio de Córdoba por dos motochorros que intentaron asaltarlo.
Me estoy muriendo

"Me estoy muriendo", el desgarrador testimonio del playero asesinado en Córdoba

Este miércoles, un asesinato estremeció a localidad de Villa Corina, al este de la ciudad de Córdoba. Un trabajador de una estación de servicio identificado como Pablo Altamirano fue baleado por un delincuente que intentó robarle sus pertenencias.

El hecho ocurrió alrededor de las 00:15 de la madrugada en la gasolinería Santa Lucía ubicada en la avenida Rancagua al 3300. Dos delincuentes se dirigieron hasta el establecimiento en una moto, uno de ellos descendió y abordó violentamente a Altamirano quien habría intentado resistirse, tras un breve forcejeo, el ladrón disparó contra el abdomen del trabajador.

Altamirano, de 36 años y padre de un niño, quedó tendido en el suelo y fue traslado rápidamente hasta el Hospital de Urgencias en un auto particular. Alrededor de dos horas después del violento suceso, los médicos confirmaron su fallecimiento.

Córdoba: la declaración de los testigos del brutal crimen

Walter, un vecino de la zona, fue de los primeros en llegar a socorrer a Altamirano y reveló en diálogo con Cadena 3 los dramáticos momentos que se vivieron. “Justo llegaba al quiosco de mi hermana, escuché el griterío. Escucho a mi hermana, ‘le pegaron un tiro a Pablo’. Le pongo una bolsa de carbón en la cabeza para levantarlo. Dice. ‘Loco me estoy muriendo, me falta el aire, me estoy muriendo’”, detalló que alcanzó a decir la víctima antes de morir.

El hombre reveló que tras las demoras de la policía y la ambulancia fueron los propios vecinos quien intentaron trasladar al playero. “Se acercó un remisero, y dicen ‘lo llevemos’. Pablo estaba escuchando. ‘Loco por favor, llevame’, le decía. Crucé la chata, lo abrí, mi hermana subió conmigo y le decía que tratara de respirar por la nariz, que siguiera respirando y salimos con toda la fe para el hospital, en el control de Rancagua y Capdevila, le digo, ‘vengo con un playero que le han disparado’”, explicó Walter notablemente conmocionado.

Embed

“Llegamos y Pablo consciente se iba quejando en todo el camino que no podía respirar. Lo bajamos y estaba consciente. Se desvaneció cuando lo subían a la camilla. Pedí ayuda, y lo entraron al quirófano pero entró consciente. Ahí nos informaron que había fallecido”, reveló el vecino que intentó socorrer al playero.

La policía y la justicia de Córdoba se encuentran ahora investigando las cámaras de seguridad de la zona para poder dar con los asesinaos de Pablo, quienes huyeron tras el violento hecho.

Se habló de