En ese marco, se desarrolló un operativo policial y persecución que se extendió por varias cuadras, en la misma zona donde a fines de agosto asesinaron al ingeniero Mariano Barbieri. Así, uno de los asaltantes, que iba en la camioneta robada al funcionario extranjero, fue interceptado por efectivos y el ladrón fue abatido mientras que su compañero se dio a la fuga.
El origen del episodio se generó en la intersección de las calles Soldado de Independencia y Gorostiaga, al momento en que dos delincuentes en moto interceptaron a los habitantes de una camioneta Volkswagen T Cross.
Armados, obligaron a las víctimas a descender del vehículo y se dieron a la fuga, lo cual generó la persecución.