La CGT es un bicho pesado de mover. Mientras movimientos sociales, las CTA y el moyanismo encaran manifestaciones en contra del FMI y preparan un despliegue grande para el 25 de mayo, la Central obrera se reunirá el lunes a debatir cómo seguir en su relación con el Gobierno a debatir la posibilidad de convocar a un paro general.