Las negociaciones con el FMI

Alberto Fernández se resigna: el Plan Plurianual y el acuerdo con el FMI quedará para 2022

El ministro de Economía defendió el proyecto en la Comisión de Presupuesto de Diputados. ¿Qué dicen los hombres que acompañan al ministro y al Presidente en las negociaciones?
Mariano Obarrio
por Mariano Obarrio |
Alberto Fernández y Cristina Kirchner el 10 de diciembre en Plaza de Mayo. (Foto. Presidencia)

Alberto Fernández y Cristina Kirchner el 10 de diciembre en Plaza de Mayo. (Foto. Presidencia)

Guzman defendió en el Congreso el presupuesto 2022

Guzman defendió en el Congreso el presupuesto 2022

El gobierno de Alberto Fernández comenzó a considerar que el Plan Plurianual y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) quedarán para enero de 2022 y comenzó a trabajar contra reloj para que el Congreso apruebe antes de fin de año la ley del presupuesto del año próximo.

“Entre nosotros, veremos si se actualiza algún número”, dijo a A24.com un funcionario del equipo económico en los pasillos del Congreso. El ministro Guzmán le dijo al plenario de la Comisión que la secuencia del tratamiento del acuerdo será así: el Estado argentino hará un acuerdo con el staff del FMI y eso generará el Plan Plurianual, que se enviará al Congreso.

Por separado, ese Plan Plurianual sería enviado por el staff del Fondo al directorio del organismo compuesto por todos los países miembros para su aprobación.

El acuerdo con el FMI quedará para enero próximo

No parece que todo ese proceso se alcance para antes de fin de año y menos aún con las fiestas de Navidad la semana próxima y de Año Nuevo de por medio. Cada vez hay menos esperanzas en los despachos oficiales. De todos modos, según confirmó A24.com Alberto Fernández, la vicepresidenta Cristina Kirchner y el propio Guzmán dan por descontado que habrá acuerdo con el FMI por lo cual el presupuesto 2022 no prevé entre sus partidas ningún pago al organismo.

El Acuerdo de Facilidades Extendidas sería por un plazo de pagos de 10 años con cuatro de gracia, con lo cual se comenzarían a cancelar vencimientos en 2026 y se iría reduciendo el déficit en alrededor de un punto por año hasta llegar al equilibrio fiscal.

“Se verá si llegamos al acuerdo a fin de año. Si no, será en 2022. Se va a intentar cerrar antes de que termine el año, pero es probable que haya que esperar hacia el verano para un cierre final de la negociación”, dijo un funcionario oficial a A24.com en el Congreso. En cuanto a las modificaciones a las pautas generales del Presupuesto, señaló: “No lo sabemos. Veremos este martes y miércoles. Siempre puede haber alguna”.

Los números de Guzmán podrían modificarse

El Presupuesto 2022 prevé ingresos en la Nación por 11,1 billones de pesos y gastos por 13,1 billones. El déficit primario es entonces de 2 billones de pesos, un 3,3% del PBI. El resultado financiero es un desequilibrio de 3 billones, un 4,9% del PBI.

En la parte más conflictiva con la oposición, la pauta de inflación para 2022 es de 33%, el crecimiento del PBI del 4%, y el dólar de 131 pesos. “Veremos si se actualiza algún número”, dijo enigmáticamente un funcionario oficial cuando se iba Guzmán.

De hecho, el último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del Banco Central actualizado a la última semana pronosticaba un crecimiento del PBI el 2,5% y una inflación de 52% para el año próximo.

Según la oposición, la subestimación de la inflación es una trampa para obtener mayores recursos por ingresos por una inflación en teoría no prevista que a su vez licúa los gastos estatales, lo cual reviste una suerte de ajuste encubierto y silencioso.

Por otra parte, la devaluación del dólar a 131 pesos también actuaría como factor de licuación de erogaciones (salarios, jubilaciones, planes sociales) y generador de mayores ingresos por exportaciones. Además, disminuirán los gastos en salud por Covid 19.

Habrá devaluación, pero sin sobresaltos bruscos

Al lado del presidente de la Comisión de Presupuesto, Carlos Heller, Guzmán dejó algunas ideas:

*“Este es un proyecto de ley que le da continuidad a la visión que propiciamos desde el Gobierno nacional, para generar inclusión sobre la base de la generación de trabajo”

*El Presupuesto da por sentado un acuerdo con el FMI porque no prevé pago de vencimientos para el año próximo.

*Se van a reducir el déficit mediante el incremento de ingresos con más un mayor crecimiento de la economía.

*Se va a reducir la brecha cambiaria pero sin saltos bruscos para no afectar el poder adquisitivo y que no se traslade a los precios.

*Se bajarán los subsidios a la energía y el transporte mediante una política de segmentación de tarifas.

*Habrá una emisión por 1,8% del PBI, de $1,08 billones de pesos, pese a que el FMI pidió frenar la emisión para controlar la inflación.

Espert, el mas duro crítico del Presupuesto

El más duro crítico del Presupuesto fue el diputado José Luis Espert, de Avanza Libertad. “Una primera causa nacional debería ser bajar el déficit fiscal, porque la gente no da más de pagar impuestos. La presión impositiva sobre el sector privado era de 17 puntos del producto hace medio siglo, hoy es de 34 puntos”, dijo el legislador liberal. “Un Estado presente para llenarlo de amigos, de ñoquis, de transas y de delincuentes”, aseguró.

En declaraciones a A24.com, el legislador señaló que “el presupuesto es un dibujo. No existe. Creo que estamos lejos del FMI. Ignoro si se trata el jueves”. Espert no forma parte de la Comisión por decisión propia, dijo. “No. No integro ninguna por decisión propia. Tenemos infinidad de proyectos de leyes en muchas comisiones y cada comisión tiene mucho trabajo burocrático que me quita tiempo”, señaló. “Pero me meteré en todas las que traten cosas críticas para la gente”, aseguró el legislador liberal.

La izquierda también rechaza los "dibujos"

Desde la izquierda, la diputada Romina Del Pla, cuestionó irónicamente los números del Presupuesto. “Este proyecto dice que la inflación va a ser de 33% y que el dólar va a valer 131 pesos. Sin embargo, el Banco Central, en su relevamiento de estimaciones de mercado, dice que va a ser del 52,1 y el dólar oficial va valer 161. ¿A quién le creemos? ¿A mamá o a papá?”, interrogó la legisladora.

“Está claro que la inflación no va a ser del 33 por ciento, como la de este año no fue del 29 por ciento”, dijo. “Le pongo humor, pero no tiene nada de humor porque la realidad es que esa pauta inflacionaria mentirosa tiene un objetivo: es uno de los mecanismos de saqueo a los bolsillos de los trabajadores y jubilados”.

La maquinita avanza a más no poder, dijo López Murphy

El diputado liberal de Juntos por el Cambio Ricardo López Murphy acusó al Gobierno por la emisión monetaria. “Le dieron a la maquinita a más no poder. La única política contracíclica que tuvieron es darle a la maquinita. Cobran el impuesto más grande del país, por el impuesto inflacionario y la brecha cambiaria. Estamos discutiendo el presupuesto y no el problema principal”, señaló el líder de Republicanos. Y recordó que las reservas “están casi a cero”.

El diputado radical de Juntos por el Cambio Martín Tetaz señaló que “el proceso presupuestario es malo, todo sabemos que lo estamos tratando no se va a cumplir. El ejemplo es el de la inflación de este cierre nomás”. Tetaz presentó una seguidilla de preguntas, entre ellas cuál será la inflación de 2021 y con qué partidas se pagará la sentencia del fallo de la Corte Suprema en favor de Santa Fe, porque la sentencia fue posterior al envío del proyecto.

La oposición promete dar quórum para aprobar el Presupuesto

Más allá de todos los cuestionamientos opositores, el diputado Luciano Laspina, vocero económico del PRO en Juntos por el Cambio, señaló que la bancada opositora dará quórum para aprobar este jueves el Presupuesto 2022 más allá de las diferencias con el oficialismo.

Es que la oposición está en una encerrona: en la última semana del año no podría privar al Gobierno de sancionar una ley de presupuesto en medio de las negociaciones con el FMI, y si lo hiciera el Gobierno podría prorrogar el presupuesto actual y manejar las partidas a su antojo.

La oposición optará por dejar las manos libres al Gobierno para que pueda llegar a un acuerdo con el FMI para no ser blanco de las excusas ante posteriores fracasos económicos. Y porque la situación de la economía podría complicarse al extremo.