El peronismo tuvo su primera reunión después de las elecciones de octubre. Fue convocada por los cinco vicepresidentes del partido, ya que Cristina, su presidenta, está privada de la libertad en San José 1111, condenada por la causa Vialidad.
El peronismo tuvo su primer encuentro después de la derrota electoral de octubre. Pases de facturas, estrategias diferenciadas y un mensaje sobre Cristina Fernández de Kirchner.
El peronismo tuvo su primera reunión después de las elecciones de octubre. Fue convocada por los cinco vicepresidentes del partido, ya que Cristina, su presidenta, está privada de la libertad en San José 1111, condenada por la causa Vialidad.
El que quedó a cargo de conducir el encuentro fue José Mayans, jefe del interbloque de senadores de Unión por la Patria (UP). Al finalizar la reunión, el propio Mayans confirmó que el peronismo trabaja para reunificar en el Senado “un solo bloque justicialista”, e insistió en la necesidad de conocer “qué quiere hacer el Poder Ejecutivo con los recursos centrales que hacen a la recaudación del país”.
“Se habló de tener un solo bloque que va a tener la denominación de bloque justicialista, y esto lo comunicamos al Consejo partidario”, señaló Mayans. Agregó que la decisión “responde a una necesidad de unidad”, ya que “el tiempo reclama eso”.
El legislador explicó además que hubo un acuerdo para trabajar en el tema del presupuesto entre diputados y senadores y que la Secretaría Económica del PJ presentará una propuesta integral sobre el esquema económico, centrada en los aspectos impositivos, laborales y de producción. “Se va a dar a conocer al pueblo argentino la visión que tenemos sobre el tema económico”, sostuvo.
Al margen, en el encuentro también se habló de otro tema que atemoriza al peronismo: la posibilidad de que se fracture el bloque en Diputados, con la fuga de los legisladores que responden a algunos gobernadores. Se trabajará para evitarlo y mostrar la mayor apertura posible.
En el encuentro, los dirigentes también acordaron que se intentará avanzar en una nueva sesión esta semana en el Senado para tratar los decretos de necesidad y urgencia. Necesitan aprovechar antes del 10 de diciembre, porque hasta ahora el peronismo sigue sosteniendo la mayoría absoluta en la Cámara. Es un tema que ya tuvo sanción en las dos cámaras y volvió en revisión al Senado, que debe decidir si acepta o no los cambios que impuso Diputados.
Por otro lado, desde el peronismo se quejaron de la falta de definiciones del Poder Ejecutivo sobre temas clave como el Presupuesto 2026, la reforma laboral y tributaria. Del primer punto quieren saber qué cambios está dispuesto a aceptar el Poder Ejecutivo, que estuvo dialogando con algunos gobernadores; de los otros dos, se quejaron por la falta de certezas. “Queremos saber qué quiere hacer el Poder Ejecutivo con los seis recursos centrales que hacen a la recaudación del país, porque esto afecta duramente a las provincias”, dijo Mayans.
Mencionó entre esos recursos el IVA y Ganancias, además de la política cambiaria, que consideró clave para evaluar el comercio exterior. “En el presupuesto lo primero que tenés que fijar es tu política cambiaria, para saber si van a mantener el dólar a 1.329, porque eso te cambia la política monetaria”, advirtió.
Sobre el debate laboral, hubo críticas a la “visión de la ultraderecha”, a la que acusó de promover “la precarización del sistema laboral”. “Las leyes no generan empleo. Lo que genera empleo es el plan económico. Cuando estuvimos en el tiempo de Cristina teníamos un desempleo de 5,9%, la economía en marcha y no como ahora, que tenemos un sistema altamente recesivo”, subrayó Mayans al terminar el encuentro.
El jefe del bloque peronista aseguró que habrá reuniones con los gobernadores para definir una posición común frente al presupuesto y la política fiscal. “Estamos dispuestos a dialogar cada tema, pero dependerá de los gobernadores qué van a hacer con sus propios recursos”, advirtió.
El senador también se refirió a las causas judiciales contra exfuncionarios del kirchnerismo y volvió a hablar de persecución política. “Tenemos claro que hay una persecución política hacia un sector, mientras otros responsables del endeudamiento multimillonario del país están libres de culpa y cargo”, denunció.
En ese sentido mencionó los casos de Julio De Vido y Guillermo Moreno. “El caso De Vido es totalmente ajeno a su función, y en el caso de Moreno, estuvo cuatro años por un hecho menor, mientras otros que hicieron un desastre están libres”, expresó.
Sobre las diferencias internas dentro del partido, minimizó los cruces entre los sectores de Máximo Kirchner y Mayra Mendoza. “En política hay que acostumbrarse a conducir el desorden, porque el orden no existe jamás. Hay diferencias, pero cuando llega el momento de definir hay que llegar a un acuerdo”, reflexionó.
Por último, ratificó el respaldo del PJ a Cristina Fernández de Kirchner, a quien consideró “una persona que representa la expectativa de mucha gente en la República Argentina”. Añadió que “va a haber un trabajo permanente por parte del partido en relación con su situación”.
También habló Máximo Kirchner, presidente del PJ bonaerense. “Salir de la situación en la que está nuestro país requiere el esfuerzo, la creatividad y la audacia de todos. Hace falta una victoria electoral, pero también una victoria política y después poder plasmarla y desarrollarla en la gestión, con los tiempos obviamente que demande, porque en lugar que estamos, que es el quinto infierno, no va a ser fácil salir”.