Desde la oposición, la radical Edith Terenzi cuestionó algunos puntos, como la comisión evaluadora y la eximición de Ganancias, al considerar que podría generar “una nueva grieta entre trabajadores”. Su postura fue respaldada por Guadalupe Tagliaferri (larretista), quien aseguró que el Ejecutivo, vía DNU, “considera más urgente facilitar la compraventa de autos que resolver la emergencia pediátrica”.
“Hay cuestiones que se pueden delegar a las provincias. Sí la atención primaria y secundaria, pero en situaciones críticas no hay en ningún lugar del mundo lugares así en el interior, y por ello los grandes centros de complejidad como el Garrahan, que forma parte de la jurisdicción federal y le compete al Estado”, expuso Tagliaferri.
El jefe del Frente de Todos en el Senado, José Mayans, defendió el dictamen: “El aporte modifica la ley y vuelve a Diputados, terminaría la emergencia. Sería sepultar el proyecto”. Lousteau, presidente de la UCR, avaló su postura. Corpacci resaltó que “hay médicos en el interior que no pueden hacer más guardias o entran en Ganancias”, mientras que Juliana di Tullio sugirió a Terenzi retirar su despacho.
El jefe libertario y presidente de la comisión de Presupuesto, Ezequiel Atauche, defendió al oficialismo: “Esta situación no surgió hace un año, viene de antes y es un 100% de otro Gobierno. Cuando les conviene o tienen ganas, la comisión tiene que trabajar”.