

El gobierno de la Provincia de Buenos Aires decidió cambiar de idea. Los responsables de la segunda ola de Covid-19 ya no son los jóvenes que se juntan en fiestas clandestinas, según el relato oficial. Tampoco son los comerciantes de la Costa que -de un día para el otro- dejaron de ser empresarios inescrupulosos y pasaron a ser estrictos cumplidores de protocolos. ¿Qué cambió en el medio?
Kicillof tomó nota de que entramos en el año electoral. "Los años pares son para tratar de gobernar e intentar sumar a algún desencantado. Los años impares son para fidelizar a los propios", describe un operador que trabajó para las distintas tribus del peronismo y sindicatos.
Los jóvenes son la base electoral del Frente de Todos. Según todas las encuestas, son los que más eligen el espacio del kirchnerismo y los destinatarios de muchas de sus políticas. Solo un ejemplo: la ley del aborto era apoyada mayoritariamente por jóvenes. ¿Qué sentido tiene pelearse con sus propios seguidores en este momento?
Por otro lado, Kicillof quedó solo como el malo de la película. Mientras gobernadores de las otras cuatro provincias grandes (CABA, Santa Fe, Córdoba y Mendoza) salieron a diferenciarse de las "recomendaciones" del Gobierno, el mandatario bonaerense se mostraba duro, pidiendo más restricciones. Nada que enamore demasiado en medio de la temporada costera.
Así salió a hablar Axelito:
De paso, ya que estaba, volvió a pelearse con los medios y la oposición. Y también les pegó a los antivacunas:
También, intentando llevar un mensaje esperanzador, apareció el ministro de Salud, Daniel Gollán. "Está habiendo un mejor comportamiento en las playas. El indicador de llamadas al 148 se ha aplanado", dijo.
"La idea del mensaje fue agradecer a los y las bonaerenses por la excelente temporada", explicaban cerca del gobernador sobre el mediodía de ayer. Nada de malas noticias, ni tampoco autocrítica por lo que fue un diciembre negro en materia de prevención epidemiológica.
Así, como rezaba un viejo dicho popular, otra vez los mejores veraneos vuelven a ser peronistas.