Opinión

Política argenta: causas y consecuencias de la crisis perpetua de gobernabilidad

Muchas veces interpretamos la realidad desconectando las causas de las consecuencias. ¿Por qué nos sucede lo que nos sucede?
Gabriel Slavinsky
por Gabriel Slavinsky |
Política argenta: Causas y consecuencias
Política argenta: Causas y consecuencias

En el instante de pensar, acordar, reflexionar… de hacer el esfuerzo, brota una apuesta a un “pleno del casino”, un “all in”, la tentación del todo o nada que usualmente no sale. Y allí comienza la seguidilla de hechos bochornosos, vergonzantes y tristes, excusas inválidas y las explicaciones más extravagantes.

En este sentido, como dijo Steve Jobs en su famosa conferencia en Stanford: “Los puntos se unen hacia atrás” y es importante concentrarse en la información del hoy, porque necesariamente construirán las consecuencias del mañana

Algunos datos

  • El presidente ya no articula ni modera al frente. Compite con la vicepresidenta
  • Las señales y cartas que antes emitía la ex presidenta, se han transformaron en mensajes y acciones de confrontación.
  • La frecuencia de los embates K, se ha incrementado. Existe la idea de que Alberto debe correrse de sus aspiraciones de reelección y dejar que gobiernen los que tienen “convicciones y la claridad de la experiencia”
  • La política no es un arte que implica solo racionalidad y cálculo de beneficios, incide fuertemente la emoción y la pasión que muchas veces priman sobre lo sensato. A la fecha pareciera existir un dominio de las pasiones por sobre las razones.
  • El país tiene una crisis de gobernabilidad. Sí, ¡ya la tiene…! La ley sobre el acuerdo con el FMI salió por un consenso con la oposición y no parece que haya muchos temas más que puedan desarrollarse en esta sintonía.
  • La oposición no tiene motivación alguna de generar caos institucional, porque calcula que en 2023 se va a imponer en las elecciones.
  • El oficialismo conoce bien que un descalabro, lo perjudica en todas sus versiones. K, AF, FR, gobernadores, intendentes, sindicatos. No es la idea principal producirlo porque sería un riesgo enorme potenciar el precipicio.
  • La política aún no se ordena. Y para poder competir en un escenario que les permite seguir el camino de las estrategias de todos los cuarteles, debe hacerlo. Una guerra de guerrillas con muchas cabezas implica cazar y ser cazado a la vez. No le sirve a ningún espacio. Aunque como domina la pasión, los cálculos tienen altos grados de incertidumbre y enormes márgenes de error.

Adicionalmente, la política sigue desconectada de la agenda ciudadana:

  • Políticos que hablan de candidaturas 2023
  • La guerra contra la inflación, que no llegó
  • Descreimiento en la palabra del presidente
  • Conflictos en el oficialismo (también en la oposición)

Dos ejemplos

1. La cuarentena fue la herramienta central del presidente en particular pero del gobierno en general. Recordamos el “Quedate en casa” o que la salud estaba por sobre cualquier otra cuestión. Hubo asistencia de parte del Estado (IFE y ATP entre otros financiados con emisión). Esta situación es por lo menos parte de las causas de la alta inflación actual. Causas y consecuencias 1.

2. En defensa de la salud de los argentinos, las escuelas no pudieron ser abiertas, llegamos a una instancia en que la ciudad no acató la medida del gobierno nacional y hoy en día una de las grandes banderas del peronismo, fue robada y “secuestrada” por la oposición. Causas y consecuencias 2.

Conclusión: la receta de siempre

La receta es acordar, generar consensos sostenidos que trasciendan los gobiernos, exponer un plan y así lograr previsibilidad y certidumbre que coloque a la Argentina en un lugar de mayor sensatez

¿Por qué nos pasa lo que nos pasa? Desconectamos las causas de las consecuencias. Y luego nos sorprendemos por lo que sucede. Es tiempo de que dirigentes y ciudadanos comprendamos que la fiesta la pagamos todos y sobre todo los más vulnerables.

El mundo está convulsionado como nunca. Argentina, como siempre.

(*) El autor es psicólogo y consultor en opinión pública