La clave está en usar una banana bien madura, ya que aporta humedad y dulzor natural, evitando sumar azúcar extra.
Cómo se preparan las cookies paso a paso
El procedimiento también es accesible para cualquier persona, incluso para quienes nunca cocinaron. El paso a paso es el siguiente:
-
Pisar la banana con un tenedor hasta obtener un puré sin trozos grandes.
Incorporar la avena y mezclar hasta formar una pasta homogénea.
Agregar los opcionales elegidos para darle sabor o textura.
Formar pequeñas bolitas con la mezcla y aplastarlas ligeramente para dar forma de cookie.
Llevar a horno moderado (alrededor de 180°C) durante 12 a 15 minutos para que se cocinen y doren levemente.
Retirar, dejar enfriar y servir.
La cocción puede variar mínimamente según el horno, pero el resultado siempre apunta a una cookie tierna, húmeda y de sabor suave.
Por qué estas cookies se volvieron una opción tan elegida
Además de ser una receta apta para cualquier nivel, hay varias razones detrás de su popularidad. En primer lugar, permiten resolver una merienda o desayuno con pocos ingredientes y sin planificación previa. También son una alternativa práctica para aprovechar bananas muy maduras que ya no se quieren consumir solas.
Otro punto a favor es que no requieren manteca, harina refinada ni azúcar añadida, lo que las convierte en una opción buscada por quienes prefieren preparaciones más livianas. A esto se suma que son portables, fáciles de guardar y se adaptan sin problema a distintas versiones según los gustos personales.
Cómo conservarlas y por cuánto tiempo duran
Una vez cocidas, las cookies pueden guardarse en un recipiente hermético. Suelen mantener buena textura durante dos o tres días a temperatura ambiente. Si se busca prolongar su conservación, es posible refrigerarlas y recalentarlas unos segundos antes de comer para recuperar suavidad.