Fabiola Yáñez fue un personaje con poca relevancia durante la presidencia de su esposo, Alberto Fernández, entre 2019 y 2023. Delegada a tareas protocolares, su figura comenzó a tomar notoriedad y sacudió la intimidad del poder a partir de la difusión de una foto en la que festejaba su cumpleaños durante el período de confinamiento más estricto.