César Pierry había saltado a la fama a fines de los años ’80 por sus participaciones en ciclos de televisión humorísticos. Había empezado su carrera como actor teatral, compartiendo escena con figuras como Pepe Cibrián, Antonio Gasalla y María Fernanda Callejón, donde desplegaba un notable talento para la comedia. Además de su trabajo actoral, estudió abogacía y fue un apasionado del ciclismo.
Entre 1987 y 1990 integró el elenco de Matrimonios y algo más, ciclo creado por Hugo Moser, junto a un grupo de actores que incluía a Rodolfo Ranni, Hugo Arana, Cristina del Valle, Gianni Lunadei, Estela Molly, Mirta Busnelli, Edda Bustamante, Adriana Salgueiro, Fernando Lúpiz y muchos otros.
En 1989 participó en su única película: el drama franco-argentino Cuerpos perdidos (Corps perdus), dirigido por Eduardo de Gregorio, con Laura Morante, Tchéky Karyo y Gerardo Romano.
Pero fue entre 1990 y 1991 cuando alcanzó el reconocimiento masivo como protagonista de Detective de señoras, otra comedia de Hugo Moser emitida por Canal 13. Allí formó una dupla inolvidable con su gran amigo Fernando Lúpiz, acompañado por Stella Maris Lanzani, Luisa Albinoni y Ricardo Morán. La serie mezclaba enredos, romance, acción y efectos especiales, y fue un verdadero éxito de audiencia.
La trágica muerte de César Pierry y las sospechas de "homicidio culposo"
El informe médico oficial determinó que el actor falleció a raíz de un paro cardiorrespiratorio posoperatorio. Sin embargo, más tarde comenzaron a circular versiones que apuntaban a una posible mala praxis, errores en la medicación o una sobredosis de anestesia. En ese marco, la causa fue caratulada como “muerte dudosa” y su familia denunció al hospital por “homicidio culposo”. Sin embargo, la Justicia no encontró responsables.
La tragedia también encendió una alarma sobre el uso de efectos especiales y elementos de utilería en la industria audiovisual, en un contexto en el que no existían protocolos de seguridad tan estrictos como los actuales.
Décadas después, su historia sería comparada con el caso del actor Alec Baldwin, quien disparó accidentalmente un arma en el rodaje de Rust y causó la muerte de la directora de fotografía Halyna Hutchins.
El proyecto televisivo que prometía marcar una nueva etapa en su carrera quedó inconcluso, y con él se apagó una de las figuras más prometedoras de la comedia argentina.
Embed - Explosión de la granada_EL CASO DE CESAR PIERRY.
Sus restos descansan en el panteón de la Asociación Argentina de Actores en el Cementerio de la Chacarita, donde todavía hoy se lo recuerda como un artista versátil, popular y carismático.