Basada en hechos reales, esta es la nueva serie española de Netflix que no te podés perder y revive el fenómeno mediático que marcó a toda una generación.
Su historia, tan polémica como icónica, es el eje narrativo de una miniserie que mezcla ironía, sensibilidad y una mirada crítica al universo del espectáculo y la fama efímera.
Estrenada recientemente en la plataforma, Superestar no se limita a contar una biografía, sino que reconstruye el ecosistema que hizo posible el ascenso y la caída de una celebridad atípica. Cada capítulo funciona como una pieza individual que se suma a un retrato colectivo donde el espectáculo, la marginalidad y la televisión se cruzan en un relato impactante y, por momentos, brutalmente honesto.
Yurena fue uno de los personajes más visibles y polémicos de la televisión española a finales del siglo XX y principios del XXI. Su salto a la fama vino acompañado de escándalos, debates públicos sobre su talento, y una intensa cobertura de los medios del corazón. En Superestar, la figura de Yurena se convierte en el hilo conductor de una narrativa coral que no solo muestra su vida, sino también la de quienes orbitaban a su alrededor.
Lejos de caer en la caricatura fácil, la serie busca comprender el fenómeno conocido como "tamarismo", una corriente de culto mediático que convirtió a Tamara en ícono y parodia al mismo tiempo. Lo hace con un guion arriesgado, que juega con lo grotesco y lo sensible, y que interpela al espectador sobre el rol de la televisión y los medios en la construcción de identidades públicas.
El papel principal está interpretado por Ingrid García-Jonsson, cuya transformación física y actoral ha sido destacada por la crítica. La actriz no solo logra capturar la estética de Yurena, sino también sus gestos, su vulnerabilidad y su fortaleza. Su interpretación aporta un nivel de realismo que conecta de forma inmediata con quienes recuerdan aquella época.
Completan el reparto figuras como Secun de la Rosa, que encarna a Leonardo Dantés; Natalia de Molina, en el rol de Loly Álvarez; Pepón Nieto, como Tony Genil; Carlos Areces, que se pone en la piel de Paco Porras; Rocío Ibáñez, como la madre de Yurema; y Julián Villagrán, quien da vida al novio y representante de la artista.
Cada uno de los seis capítulos propone un enfoque distinto, lo que otorga a la serie una estructura fragmentada y dinámica. Esta narrativa multiforme permite observar distintas capas del personaje de Yurema, desde su intimidad hasta su exposición pública, pasando por su entorno más cercano: amigos, representantes, rivales mediáticos y familiares.
A pocos días de su estreno, Superestar ha logrado posicionarse entre lo más visto de Netflix. La crítica ha elogiado su capacidad para mezclar sátira y drama sin caer en el ridículo, así como el riesgo narrativo que representa contar una historia que muchos recuerdan pero pocos comprenden en profundidad.
Algunos medios especializados han comparado la serie con Veneno o incluso con producciones internacionales como Pam & Tommy, por su forma de abordar el fenómeno de las celebridades desde una óptica más humana y crítica. El consenso es claro: se trata de una propuesta audaz, que no teme al exceso ni al melodrama, pero que lo usa a su favor.