La incomodidad de Vicuña fue inmediata, pero lejos de esquivar el tema, él respondió con ironía: “Yo creo que a esta altura más como para una teleserie vamos a poder hacer, ¿no?”.
Lo que parecía un momento de humor rápidamente se transformó en un verdadero escándalo familiar televisado. Su madre, lejos de callar, disparó la confesión que nadie esperaba: “Pero te acordás cuando te entrenamos con el Cura de Uruguay, ¿no? Es que cuando el Benja bautizó a la Magnolia. De repente alguien le dijo, ‘Padre, ¿por qué no aprovecha hacer dos en uno?’. Y aprovechamos de casar”.
El silencio en el estudio fue total. Las palabras de Isabel abrían la puerta a un secreto largamente oculto: ¿hubo o no hubo casamiento entre Vicuña y la China Suárez?
La revelación no quedó ahí. La madre del actor sumó más detalles que parecían sacados de una película: “Habían dado unas bolsitas (...) eran de arroz. Yo le decía: ‘Padre, recé todos los días por esta pareja, digamos’”.
Fue entonces cuando Bolocco, sin dudar, repreguntó con picardía: “¿Fue un rito?”.
La respuesta de Vicuña fue seca y terminante, como intentando cortar el tema de raíz: “No fue un rito. No, no”.
La incomodidad en su rostro fue evidente. Las cámaras lo captaron moviéndose inquieto en su asiento, como si aquel recuerdo fuera un capítulo que preferiría borrar de su vida.
La confesión de su madre, quedó claro que algo ocurrió en aquel bautismo de Magnolia, la hija que Vicuña y la China tuvieron juntos. Y aunque él intentó desmentirlo en vivo, la semilla de la duda ya quedó instalada.