¿Alguna vez pensaste que tu derrota en el Quini 6 podía deberse a algo más que a la mala suerte? Hay cifras que, lejos de convertirse en el boleto dorado hacia la riqueza, parecen traer consigo una especie de maldición numérica. Números que se repiten en las boletas, que obsesionan a los jugadores, pero que al final solo sirven para enterrar millones de ilusiones.