El médico de guardia del Hospital Argerich mientras explicaba a los pacientes el motivo de la demora en la atención (Foto: captura de "X" @ClaraLatana).
En las últimas horas comenzó a viralizarse la discusión de un médico de guardia del Hospital Argerich, situado en el barrio porteño La Boca, con pacientes provenientes del conurbano bonaerense que reclamaban ser atendidos tras acusar una larga espera.
En el video de la escena ocurrida el miércoles pasado por la noche, se ve el momento en que el doctor reconoce estar "sobrepasado" mientras intentaba contener a al menoa seis pacientes y familiares que amenazaban con "quemar todo" debido a la demora.
“Somos ocho médicos y lo que ustedes no ven es que por atrás entran las ambulancias. Ingresaron cinco personas para intubar. Estamos todos corriendo hace tres horas. Sientense y los vamos a llamar", dijo el médico a los presentes que, de inmediato, le reprocharon las cuatro horas de espera.
Ante esto, el profesional preguntó a cada persona “¿Usted de dónde viene?”. Las respuestas fueron: La Plata, Florencio Varela, Zapiola, Alpartagatas, Aldo Bonzi, Avellaneda, todas localidades de la provincia de Buenos Aires.
En efecto, el médico planteó: “Ninguno viene de La Boca. Tengo una capacidad de recursos para gente de la Capital Federal, especialmente del barrio de La Boca", explicó.
Y luego continuó: “Yo atiendo a toda la gente que puedo atender. Estoy explicando por qué estoy sobrepasado de trabajo. Y es porque todo el mundo viene para acá”.
Por su parte, en una charla que comenzó a tornarse más acalorada, las personas de la guardia arguyeron que nunca fueron informados sobre la disposición del Hospital.
“Espérenme porque otra no hay y la camilla cucheta todavía no la inventaron. Les pido un ratito y los voy a atender”, devolvió el doctor.
“Entonces, ¿cuatro horas más?”, lanzó una de las mujeres. “O cinco...”, contestó el médico mientras se retiraba escoltado por tres empleados de seguridad del Argerich.
“¡Sos un atrevido!", gritó una de las presentes, mientras que otra amenazó: “¡Entonces vamos a quemar todo acá!”.
