“¿Cuáles son las opciones que tiene hoy la Justicia? Un botón de pánico o de alerta y el límite o la restricción de distancia. Las dos cosas no alcanzan porque el botón llega tarde, o el agresor no respeta la perimetral”, expuso.
Y luego llegó su propuesta: “En muchos países se está comenzando a usar la taser de uso civil, que es de la víctima, de quien está siendo amenazada”, dijo.
Los riesgos de darle pistolas taser a los civiles
La abogada penalista Patricia Anzoátegui, especializada en “falsas denuncias de abuso y violencia”, se opuso a la propuesta del ministro de Gobierno porteño: “Yo estoy en contra. En el contexto de la problemática de género actual, es desconocer lo que la sociedad está reclamando”.
Luego, fue dura al decir: “Lo de Macri es electoralista. El problema es más amplio”.
"Hay muchísimos casos de falsedad en este tipo de denuncias", alertó y completó: “La taser es un arma que es menos letal, no que no sea letal. La descarga eléctrica se aplica como una picana”.
“No se puede aplicar una ley distinta para un hombre y para una mujer. Eso no es constitucionalmente válido”, sostuvo la doctora y finalmente argumentó: “Ante la misma situación al hombre se lo detiene y a la mujer no. Por eso hay que establecer políticas que garanticen el bienestar para el individuo sin poner un arma en la mano”, sintetizó la abogada.