El temor a represalias deportivas también fue una preocupación destacada para el entrenador. "Le tengo miedo a las venganzas deportivas. Porque eso existe por parte de aquellos que son dueños de todo esto. Esto es una plaga de mentirosos. Deberían disculparse con los jugadores en lugar de plantear posibles sanciones", afirmó, destacando su desconfianza hacia los gestores del deporte.
Bielsa no se detuvo ahí y cuestionó la integridad del periodismo deportivo, al que acusó de estar al servicio de quienes controlan el poder y el dinero. "Responde a intereses relacionados con quienes manejan el poder y distribuyen el dinero. Callan según qué parte del poder quieren favorecer o perjudicar", criticó severamente.
Finalmente, Bielsa expresó su frustración con la organización del torneo y las condiciones en las que se llevan a cabo los partidos y entrenamientos. "Ya estoy cansado. Uno acumula injusticias. Esto es una plaga de mentirosos. Aquí te dan una cancha terminada hace tres días con las uniones sin cerrar. Los campos de entrenamiento son un desastre", concluyó, dejando claro su descontento con el estado actual del fútbol internacional.