Sobre lo sucedido dentro del quirófano, la familia mantiene serias sospechas. Según el relato del padre, el cirujano les explicó que mientras realizaba la extracción del segundo injerto le indicaron que se detuviera porque Camilo había entrado en paro cardíaco. “El cirujano no entendía por qué había pasado”, afirmó.
Además, señaló que se rumorea que el problema podría haber sido un error en la aplicación de la anestesia, específicamente en la epidural que le fue suministrada junto con la sedación por máscara. Sin embargo, aclaró que no pueden asegurarlo hasta que se realice la autopsia.
“Voy a ir hasta las últimas consecuencias. Pienso que fue mala praxis”, aseguró el padre con firmeza, dejando claro que la familia iniciará todas las acciones legales necesarias para esclarecer lo que pasó y buscar justicia por la muerte de Camilo.
El dolor no solo golpeó de lleno a San Telmo, sino también a todo el fútbol argentino. Camilo había pasado por las inferiores de Boca Juniors e Independiente antes de llegar al club de la Isla Maciel, donde supo consolidarse como un referente en la Reserva, disputando 82 partidos y ganándose el respeto de sus compañeros y entrenadores.
El cuerpo del joven fue trasladado desde el sanatorio Espora de Adrogué hacia la morgue judicial en Lomas de Zamora, donde este jueves, desde las 10 de la mañana, se realizará la autopsia que será clave para determinar las causas exactas de la muerte.
Mientras tanto, la investigación penal ya está en marcha y la familia, devastada, aguarda respuestas. La muerte de Camilo Nuin dejó un vacío enorme y una dolorosa pregunta que hoy atraviesa a todos: ¿se podría haber evitado?