Y si bien el Fondo no exige la aprobación legislativa de sus programas, la falta de consenso político alrededor de las metas económicas y condiciones para los próximos años que planteó el Ejecutivo en el Memorándum de Políticas Económicas y Financieras y el Memorándum de Entendimiento Técnico puede llegar a generar "desconfianza".
Sin programa económico, ¿peligra el visto bueno del FMI?
"Una cosa es la aprobación formal del programa y otra muy distinta es la confianza en su cumplimiento", explicó en diálogo con A24.com Héctor Torres, economista y ex representante argentino ante el FMI, quien destacó que pese a la exclusión del artículo 2, la "situación internacional" dará contexto para que el organismo apruebe los desembolsos.
En este sentido, advirtió que "decir 'quiero los dólares del FMI, pero no el programa con el FMI' genera muchas dudas sobre la capacidad y voluntad del gobierno de cumplirlo".
Y aclaró: "De todos modos, como el FMI no exige la aprobación legislativa de sus programas y como la situación internacional está tan complicada, es probable que el directorio termine aprobando el primer desembolso".
Consultado acerca de si el Gobierno puede rearmar el Plan Plurianual que preveía metas fiscales, monetarias, inflacionarias, entre otras, para los futuros años para volver a inspirar esa confianza, argumentó que la guerra entre Ucrania y Rusia proveerá de un contexto particular.
"Creo que la situación internacional genera una gran incertidumbre que va a exigir flexibilidad tanto en las medidas que tiene que tomar el gobierno para cumplir con las metas del programa, como en los plazos previstos para cumplirlas", analizó en conversación con este medio.
Por qué el acuerdo depende de la aprobación del FMI
El nuevo entendimiento es un Acuerdo de Facilidades Extendidas (EFF, por sus siglas en inglés) o lo que se conoce como "Servicio Ampliado" que otorga un plazo de gracia de cuatro años y medio para empezar a pagar y tiene máximo de diez años para el repago, a diferencia del crédito Stand By, el estándar del organismo, que es más corto.
El objetivo es refinanciar la deuda récord de aproximadamente 45.000 millones de dólares que tomó la administración de Juntos por el Cambio.
Durante los próximos dos años y medio se realizarán 10 revisiones de manera trimestral y el primer desembolso depende de la aprobación del directorio de la entidad que conduce Kristalina Georgieva. El resto, luego de completarse cada revisión.
Como se trata de un EFF, Argentina comenzará a pagar en 2026, cuando se cumplan los cuatro años de gracia contemplados en los acuerdos de estas características. El período de repago de cada desembolso es de 10 años, por lo que la deuda se cancelará hasta 2034.
Por qué se excluyó el programa económico del proyecto
Tras las exposiciones en comisiones y las negociaciones entre el Gobierno y la oposición, se obtuvo un dictamen único de mayoría en el que se aprobarían "las operaciones de crédito público contenidas en el 'Programa de Facilidades Extendidas' a celebrarse entre el Poder Ejecutivo Nacional y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para la cancelación de los vencimientos del 'Acuerdo Stand By' oportunamente celebrado en 2018 y para apoyo presupuestario".
Juntos por el Cambio había calificado al artículo 2, que contenía los memorándums del programa económico como "invotables", mientras que sectores del oficialismo que responden a La Cámpora y al dirigente Juan Grabois se mostraban reacios a acompañar la iniciativa. La modificación del proyecto fue el punto de consenso para obtener el dictamen.