El retroceso se explicó por varios factores, enumeró el Indec: el consumo privado, que disminuyó un 13,1%, la formación bruta de capital fijo cayó 13% y las exportaciones bajaron un 17,7%, mientras que las importaciones disminuyeron 18,1% respecto de 2019.
Por otra parte, sólo los sectores de electricidad, gas y agua e Intermediación financiera crecieron en comparación con el año anterior, con un avance del 0,9% y el 2,1% respectivamente.
Además, otros sectores de la actividad sufrieron fuertes pérdidas durante el 2020, especialmente hoteles y restaurantes (que cayeron 49,2%), otras actividades de servicios comunitarias, sociales y personales (disminuyeron 38,9%) y transporte, almacenamiento y comunicaciones (descendió 17%) e Industria manufacturera (cayó 7,7%).
En particular, el cuarto trimestre de 2020, el PIB creció 4,5% en términos desestacionalizados respecto del tercer trimestre, pero se contrajo 4,3% en la comparación al mismo período del año anterior. En la comparación con el tercer trimestre, las exportaciones cayeron un 8,7%, pero las importaciones aumentaron 14,1%, la formación bruta de capital fijo aumentó 17,3%, el consumo privado creció 4,2% y el consumo público se incrementó 1,3%.
En este escenario, el economista de C&T Asesores Económicos, Camilo Tiscornia, consideró que este panorama es “dramático” y reflexionó que de cara a este año, todo lo que puede suceder es más bien incierto.
“Puede caer la actividad según si ocurra algún cierre o restricción por el Covid o restricción, pero en general por el arrastre del año pasado, se puede crecer un 6%”, analizó el especialista, quien graficó que el rumbo de la economía podría oscilar como un electrocardiograma, con altibajos, pero sobre cierta horizontalidad. “No va a haber mes a mes una gran tendencia al crecimiento, pero se va a ver el efecto por la recuperación comparada al año pasado”, indicó.
Por otro lado, anticipó que sectores como el turismo y la hotelería van a continuar atados a restricciones, mientras que la construcción podrían registrar un repunte importante. “Cuenta con el impulso oficial y se combina con que es una forma atractiva de proteger el capital”, sostuvo Tisconia.