EXCLUSIVO ⚡

Alejandro Sabella, el señor del fútbol que propició las últimas emociones que generó la Selección Argentina

Carlos Arasaki
por Carlos Arasaki |
Alejandro Sabella, el señor del fútbol que  propició las últimas emociones que generó la Selección Argentina

La camiseta argentina -símbolo máximo del fútbol nacional- todavía chorrea las lágrimas que provocó la pérdida de Diego Maradona. Está empapada como una prenda sumergida por completo en un tacho con agua. Es imposible que se pueda mojar más de lo que está. Pero en este año espantoso, parece que siempre se puede más. Se murió Alejandro Sabella. Pachorra tenía 66 años.

Sabrá disculpar José Omar Pastoriza si hoy le pedimos prestado el apelativo para evocar que se fue un señor del fútbol. Un entrenador con estirpe de docente. Un docente con don de gente. Un estratega lúcido, pensante, cálido y sensible.

"Puedo ser conocido o popular, pero no me interesa eso. Me interesa ser prestigioso porque ser conocido o popular no implica que haya valores de por medio. Ser prestigioso sí. Debemos ser ante todo, dignos. Como les dije a los muchachos antes de la final del Mundial, seamos dignos nosotros mismos. Seamos dignos con nuestros compañeros y con los rivales. Seamos dignos en la victoria y en la derrota", pronunció a fines de 2014 cuando fue galardonado con el Premio Democracia.

Embed

Con apenas trece días de diferencia, murieron dos de los tres últimos técnicos que tuvo la Selección en Mundiales. Diego tuvo el privilegio de saber cuánto pesa la Copa del Mundo como futbolista, Alejandro se quedó con la espina de haber estado muy cerca como entrenador.

Sí tuvo Sabella la virtud de ser el responsable del mayor disfrute de Messi en la Selección Argentina. Lo contó el propio Leo en entrevista con Fox Sports: "Tuve muchísimos técnicos, pero la época que más disfruté fue con Alejandro (Sabella). Con él, si bien en las Eliminatorias empezamos mal, con él fue una etapa espectacular. Porque cuando ganás es todo es más fácil y en esa época no perdíamos y terminamos en una final de un Mundial. Y aparte Alejandro, que era un fenómeno como técnico y como persona".

Embed

Enganche clásico, fino y elegante para jugar, no tuvo en River el protagonismo que pudo haber tenido en otro club porque fue contemporáneo al Beto Alonso. Nunca renegó de eso y siempre fue funcional al equipo. A los equipos en los que estuvo Fue dirigido por Labruna en el millonario y por Bilardo en Estudiantes, los dos equipos que más quiso en su vida. Tuvo pasos fugaces por Sheffield y Leeds de Inglaterra, Irapuato de México y Ferro.

Luego de ser ayudante de Passarella en River, Parma, Monterrey, Coronthians y las Selecciones de Argentina y Uruguay, Pachorra asumió en 2009 como entrenador de Estudiantes y en pocos meses pasó de técnico a leyenda. Le dio la Copa Libertadores al Pincha después de 29 años y tuvo contra las cuerdas al mejor equipo de la historia, el Barcelona de Guardiola que ese año ganó seis títulos. El pecho de Messi lo privó de ser campeón del mundo. Un lustro después, el pecho y el zurdazo posterior de Götze le volvieron a negar el título mundial.

Embed

Lo único que jamás perdió, como a él le importaba, fue la dignidad. Y lo único que precisamos ahora es que aparezca Lavezzi con una botella en la mano, nos tire agua en la cara y nos despierte de esta pesadilla horrible.

Se habló de