"la historia de Francia debe ser otra luego de este caso", dijo Gisèle Pelicot, la mujer que denunció a su esposo por haberla sometido a múltiples violaciones a manos de otros hombres durante 10 años. El tribunal dio un fallo ejemplar.
La justicia de FRancia aplicó un fallo ejemplar a Dominique Pelicot por la sumision absoluta - con violaciones masivas - a su mujer durante 10 años (Foto: Gentileza El País)
Dominique Pelicot fue declarado culpable en un juicio por violación masiva que ha conmocionado a Francia. Se le impuso una sentencia máxima de 20 años de prisión por violar repetidamente y reclutar a desconocidos para abusar de su entonces esposa, Gisèle Pelicot, a lo largo de una década.
Otros 50 hombres, reclutados por Pelicot mediante redes sociales para contactos sexuales, también fueron declarados culpables de participar en el abuso, aunque muchos han recibido sentencias más cortas de las solicitadas por los fiscales.
Cuando se decidió a llevar su caso a los tribunales, Gisèle Pelicot decidió perder cualquier tipo de anonimato. Pidió que se caso se transmitiera por la televisión para que toda Francia conociera como fueron sus padecimientos durante 10 años, bajo la apariencia de una familia ejemplar. Fueron 4 meses de audiencias que terminaron con la condena para todos los acusados. Se cumplió así lo que Gisèle dijo el primer día del juicio: "La vergüenza debe cambiar de bando".
Como durante todos estos 4 meses, Gisèle Pelicot tuvo una gran cantidad se seguidores que la acompañaron, a ella y a sus hijos, en cada día de audiencias. Por lo que este día, el de la sentencia fue especial. Había más gente que de costumbre y muchos pasacalles a su favor en los alrededores de la sede judicial.
Dominique Pelicot, junto con otros 50 hombres, fueron condenados a duras penas de prisión por la violación sistemática de Gisèle - esposa de Dominique - durante 10 años consecutivos.
Gisèle Pelicot ha pasado a ser una heroína para la condición de la mujer en Francia. su esposo recibió una pena de 20 años de prisión. Dominique tiene 71 años, por lo que es muy probable que muera en una prisión francesas.
También fueron condenados la totalidad de los 51 hombres acusados por la fiscalía de haber abusado de Gisèle mientras ella no estaba en condiciones de negarse o defenderse. su marido la drogaba y cuando estaba adormecida o atontada, llegaban hombres a su casa que cometían reiterados abusos sexuales. Todos enfrentaron cargos por violación agravada e intento de violación.
Al momento de leerse el fallo condenatorio en un tribunal de Aviñón, Gisèle apoyó su cabeza contra una de las paredes de la sala del tribunal, mientras su familia también participaba de la audiencia.
Dominique y Gisèle podrían conformar la "familia modelo" para la sociedad moderna. Un matrimonio completo con tres hijos viviendo en armonía y felicidad. Pero detrás se escondía algo mucho peor que una pesadilla. Dominique se comunicó con una red social para encuentros sexuales. Allí formó una especie de "club" de hombres a los que convocaba por turnos a su hogar. Allí tenían a su disposición a Gisèle, que estaba atontada por unas drogas que le daba su marido. Dominique agotaba la perversión al grabar esos abusos y luego compartirlos en redes sociales especiales.
Pero en el seno de la familia todo parecía normal. Ni Gisèle ni sus hijos sospechaban lo que ocurría en a casa que compartían como Dominique como una familia feliz.
Dominique cayó por un tonto descuido. Grabó a una mujer en un supermercado. Hizo una toma con su celular de la entrepierna, pero lo mujer lo denunció y el personal de seguridad del local lo retuvo y llamó a la policía. Ese hecho derivó en un allanamiento en su hogar. Cuando la policía revisó su computadora encontró los videos que coleccionó durante una década de los abusos a su mujer. Incluso, su hija se horrorizó al ver fotografías suyas, durmiendo y sin ropa, que el padre le sacó sin que ella supiera. Todo ese material, estaba disponible en el "club" que armó mediante una red social específica.
Cuando la causa tomó estado público, Gisèle produjo un hecho histórico.
Esta terrible experiencia durante casi una década, transformaron a Gisèle Pelicot en una heroína en la lucha por el respeto integral de las mujeres. Los cuatro meses que duró el juicio unió a los activistas contra la violencia sexual y provocó llamados a medidas más estrictas contra ese tipo de abusos por género
En este sentido, Aviñón, sede del proceso, tuvo posados los ojos de todos lo franceses. Los testimonios, desde el primer día fueron espantosos y muy duros. Especialmente cada vez que se pasaban los videos como prueba de los abusos.
En un principio, la defensa de Dominique y de algunos de los otros 51 condenados, intentó convencer a la Justicia de que Gisèle, no estaba drogada y consentía el "juego" que su marido había armado con 51 hombres que convocaba con regularidad.
Pero sus argumentos fueron rechazados. Entonces, en su alegato final, Dominique pidió perdón a su mujer y a sus hijos por tanto sufrimiento a lo largo de estos años. El tribunal de Aviñón le aplicó la pena de 20 años de prisión.
Luego de escuchar las múltiples sentencias condenatorías, Gisèle dejó la sala judicial en completo silencio. A pesar del enjambre periodístico que la siguió. En la calle había muchos más periodistas y mucha gente que la aplaudía y vivaba al reconocerla. Un solo grito resumió, la valentía de Gisèle Pelicot al hacer frente y contar su padecimiento: "!Gracias!"
Gisèle Pelicot, logró hacer que la vergüenza cambie de bando.
