Medio Oriente

El Pentágono afirmó que Estados Unidos devastó el programa nuclear del régimen iraní

El secretario de Defensa, Pete Hegseth, afirmó que los ataques fueron un “éxito abrumador”. Advirtió que aunque Washington no busca la guerra, responderá con fuerza si sus intereses se ven amenazados.

El Pentágono afirmó que EEUU devastó el programa nuclear del régimen iraní (Foto: archivo)

El Pentágono afirmó que EEUU devastó el programa nuclear del régimen iraní (Foto: archivo)

El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, aseguró este domingo que los bombardeos lanzados contra las instalaciones nucleares de Irán fueron un “éxito increíble y abrumador” que logró “devastar” la capacidad atómica del régimen. La operación, denominada “Martillo de Medianoche”, fue ejecutada por orden del presidente Donald Trump y representa una de las acciones militares más significativas en la historia reciente del conflicto con Irán.

“Muchos presidentes soñaron con dar el golpe final al programa nuclear de Irán. Ninguno pudo, hasta el presidente Trump”, declaró Hegseth en una conferencia de prensa desde el Pentágono.

La ofensiva se dirigió contra tres instalaciones nucleares clave: Fordow, Natanz e Isfahan, y empleó 75 armas guiadas de precisión, incluidas bombas antibúnker y misiles Tomahawk lanzados desde submarinos. Según el general Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto, las evaluaciones preliminares indican que los sitios sufrieron “daños y destrucción extremadamente severos”.

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Hegseth recalcó que el objetivo fue puramente estratégico

“No se atacaron tropas ni civiles. Esta misión no tuvo nada que ver con un cambio de régimen, sino con neutralizar una amenaza directa a nuestros intereses y proteger a nuestras tropas y aliados, en especial a Israel”.

El ataque incluyó el despliegue de bombarderos B-2, en lo que fue la misión aérea más extensa desde 2001, y marcó el primer uso en combate de la bomba MOP (Massive Ordnance Penetrator), capaz de perforar búnkeres subterráneos.

Horas después del ataque, la Guardia Revolucionaria iraní respondió lanzando 40 misiles contra Israel, provocando al menos 80 heridos y daños considerables en Tel Aviv. El ejército israelí contraatacó rápidamente, apuntando a lanzadores y objetivos militares en el oeste de Irán.

Desde el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) se informó que no se registraron aumentos de radiación fuera de los sitios bombardeados, aunque continúa el monitoreo constante.

“Estados Unidos no busca una guerra. Pero actuaremos con rapidez y decisión si nuestro pueblo, aliados o intereses se ven amenazados. Irán debería saber que el presidente Trump habla en serio”.

La operación estadounidense se da luego de una semana de ataques israelíes que habrían debilitado significativamente las defensas aéreas iraníes, preparando el terreno para esta ofensiva conjunta que marca una escalada sin precedentes en la región.