Tras escuchar las detonaciones, varios vecinos salieron de sus casas y vieron a las dos mujeres tendidas en el asfalto. Inmediatamente dieron aviso al 911 y solicitaron una ambulancia. Los primeros en llegar fueron agentes del Comando de Patrullas de La Matanza, seguidos por una unidad médica del SAME.
Las hermanas fueron trasladadas de urgencia a la Clínica Catán. Los médicos realizaron maniobras de reanimación sobre Esmeralda, pero no lograron revertir la gravedad de la herida. A pesar de los esfuerzos, la joven fue declarada muerta minutos después de ingresar al hospital.
Su hermana Emilce permanece internada, fuera de peligro y bajo observación médica, aunque con un profundo shock emocional por la pérdida.
Uno de los datos más inquietantes de la investigación es que los delincuentes huyeron sin llevarse ningún objeto. Esto refuerza la hipótesis de que la violencia empleada no respondía únicamente a un robo común, sino que podría tratarse de un ataque con otra motivación.
Sin embargo, las autoridades no descartan que la reacción de Emilce, quien es policía, haya generado un forcejeo que terminó con los disparos antes de que los ladrones pudieran concretar el robo.
El caso quedó a cargo de la UFI N°3 de La Matanza, bajo la carátula de “homicidio”. El fiscal Federico Medona dispuso un operativo especial y ordenó que todos los Grupos Tácticos Operativos (GTO) del sur del distrito se aboquen a la localización de los autores.
Hasta el momento, se sabe que las motocicletas utilizadas por los delincuentes no tenían patente visible y que los cascos cubrían la totalidad de sus rostros, dificultando la identificación. No obstante, se están analizando cámaras de seguridad de la zona, tanto públicas como privadas, con la esperanza de encontrar imágenes que permitan dar con el paradero de los responsables.
Esmeralda Bustamante, la víctima fatal, tenía 23 años y era conocida por su carácter amable y solidario. Trabajaba en un comercio local y ayudaba a su madre en tareas familiares. Su muerte deja un profundo vacío entre sus allegados.
Su hermana, Emilce Aldana Bustamante, es oficial de la UTOI, una unidad de intervención rápida de la Policía Bonaerense especializada en operativos de alto riesgo. Ingresó a la fuerza hace tres años y es reconocida por sus compañeros como una agente comprometida y profesional.