JOVEN DESAPARECIDA

La Justicia confirma la identidad de los restos hallados en un departamento del centro de Córdoba

La Justicia de Córdoba confirmó que los restos hallados dentro de un armario sellado en un departamento del centro pertenecen a Milagros Micaela Bastos, una joven de 22 años desaparecida en agosto de 2024.

El edificio donde se encontraron los restos de la mujer de 30 años

El edificio donde se encontraron los restos de la mujer de 30 años, que hoy fue identificada. (Foto: archivo).

La identidad de los restos fue confirmada mediante un análisis de ADN solicitado por la fiscal Silvana Fernández, a cargo de la investigación por la desaparición de la joven.

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Milagros se encontraba en situación de extrema vulnerabilidad y padecía adicciones en la zona del Bajo Pueyrredón. Su familia había realizado varias denuncias sobre su ausencia entre noviembre y diciembre del año pasado.

El hallazgo se produjo en un edificio ubicado sobre calle Buenos Aires al 300, cuando dos albañiles que realizaban trabajos de refacción percibieron un olor nauseabundo proveniente de la unidad 3 B. Tras dar aviso, la policía ingresó al lugar y descubrió una puerta tapiada.

Detrás de esa pared improvisada encontraron un armario sellado con cemento. En su interior, el cuerpo estaba envuelto en mantas, atado con un cable y en posición sentada.

Las pericias de genética forense y antropología confirmaron la identidad de la víctima. La investigación intenta reconstruir las circunstancias de su muerte y determinar quién fue responsable de ocultar el cadáver en ese lugar.

El hallazgo del cuerpo y el principal sospechoso

Dos albañiles encontraron el cadáver de la mujer en avanzado estado de descomposición el pasado 5 de julio dentro de un ropero, en un departamento del centro de la ciudad.

El cuerpo fue descubierto en un inmueble ubicado en calle Buenos Aires al 300, en pleno centro cordobés. Los trabajadores fueron contratados para hacer arreglos, y al ingresar al tercer piso del edificio, el fuerte olor nauseabundo los guió hasta un ropero.

Allí hallaron el cuerpo de una mujer de unos 30 años, atado con cables, envuelto en colchas y sentado dentro del armario. No tenía documentos ni elementos que permitieran conocer su identidad. Según las pericias forenses, de ese momento, el cuerpo podría haber estado oculto durante más de dos años.

El departamento donde fue encontrado el cadáver había sido alquilado por Horacio Antonio Grasso, un ex policía condenado en 2007 a 27 años de prisión por el asesinato de Facundo Novillo. Se investiga si en el momento del hecho el ex policía se encontraba con el beneficio de la prisión domiciliaria, que perdió hace unos meses tras un episodio violento que protagonizó en contra de su madre.

Si bien aún no se estableció un vínculo directo con el hallazgo actual, la sospecha sobre Grasso es inevitable, sobre todo porque el cadáver fue descubierto en una propiedad bajo su nombre, aunque él ya no vivía allí.

El caso también investiga a su hermano, quien estaba a cargo de gestionar las reformas del edificio. La fiscalía intenta determinar cuándo y cómo fue ocultado el cuerpo, y si hubo encubrimiento por parte de otras personas.