Durante su hospitalización, los médicos detectaron múltiples lesiones y una aguja de 2,5 centímetros clavada en la zona lumbar. Este objeto, colocado en la cuna para castigarlo cuando lloraba, estaba oxidado y provocó una infección generalizada que derivó en un cuadro séptico mortal.
El episodio final que precipitó su muerte ocurrió el 19 de septiembre, según reconstruyó la investigación. Testimonios de las hermanas de Aquino revelaron que la pareja subió la música a todo volumen para ocultar lo que sucedía. La madre gritaba: “León, reaccioná”, mientras Fernández respondía: “Llamá a una ambulancia, se ahogó con la leche”.
El padrastro le puso la mamadera y luego lo cubrió por completo con frazadas y almohadas. Como seguía llorando, entró al menos cuatro veces al cuarto sin permitir que otros intervinieran, hasta que dejó de escucharse al niño.
El bebé fue trasladado al Hospital Evita Pueblo de Berazategui, donde la pareja dijo que se había ahogado con la mamadera, y luego derivado al Hospital El Cruce de Florencio Varela. Allí se constató la existencia de numerosas lesiones compatibles con maltrato infantil, lo que llevó a la intervención judicial. La autopsia determinó que la muerte se produjo por un cuadro séptico derivado de la aguja alojada en su organismo, contaminada con bacterias y virus.
El requerimiento de elevación a juicio, a cargo de la fiscal Gabriela Mateos, de la UFyJ N° 3 de Berazategui, detalla el martirio que sufrió León, con especial énfasis en los abusos cometidos por Fernández, confirmados además por las hermanas de la imputada. Entre los padecimientos, se destacaron golpizas a mano abierta y con palos, mordidas en el cuello y las manos, baños en pleno invierno desnudo al lado de la ventana, y exposición a hormigas sobre caminos de pan en la cuna.
Asimismo, el niño sufrió que le pusieran pimienta o flema en la leche, le taparan la cara con almohadas hasta casi asfixiarlo, lo rociaran con agua helada, le clavaran alfileres en el paladar y agujas en los pies, y que le dieran huesos de pollo que le astillaban la garganta. También fue ahogado en una palangana.