La investigación es llevada adelante por la Dirección de Unidades Operativas Federales (DUOF) de San Isidro, que trabaja de manera conjunta con la Policía Federal Argentina (PFA), siguiendo las directivas del juzgado. Desde el Gobierno remarcaron que cualquier confirmación oficial sobre el caso será comunicada exclusivamente por la autoridad judicial competente.
Uno de los elementos que forma parte del expediente es una carta que Rodrigo Gómez dejó antes de morir. En el escrito, el joven se despidió de su familia y reconoció atravesar una situación económica compleja, con deudas que lo angustiaban. Este aspecto también será analizado por los investigadores para reconstruir el contexto personal y emocional que atravesaba el soldado.
Quién era el soldado hallado muerto en la Quinta de Olivos
El soldado hallado sin vida era oriundo de la provincia de Misiones y estaba destinado al Escuadrón Chacabuco del Regimiento de Granaderos a Caballo. Su perfil crediticio registra deudas de distinta antigüedad por casi dos millones de pesos con bancos y entidades financieras. El pago de su salario estaba a cargo de la Contaduría General del Ejército, mientras que la Casa Militar depende de la Secretaría General de la Presidencia.
Toda la información recabada fue puesta a disposición de la jueza Arroyo Salgado. De acuerdo a las primeras pericias, el disparo que provocó la muerte habría sido efectuado con un fusil FAL, arma que se encontraba junto al cuerpo.
Según los informes oficiales, el cadáver fue hallado “dentro de uno de los puestos internos” de la Quinta. De inmediato se activaron todos los protocolos correspondientes en ese marco, intervino la DUOF San Isidro de la PFA, que realizó las primeras actuaciones junto con el área de Seguridad Presidencial.