Para instrumentar esta medida, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, viajará personalmente este miércoles para poner en marcha las operaciones de refuerzo.
“En segundo lugar -continuó el mandatario- he decidido que el Ejército Argentino, a través de su compañía de Ingenieros, participe en la urbanización de barrios populares, acelerando tareas pendientes de ejecución”.
En el primer tramo de su mensaje, el Presidente expuso las tareas en conjunto que realizó con el gobernador Omar Perotti y el intendente rosarino, Pablo Javkin, quienes en los últimos días acentuaron sus críticas hacia la Casa Rosada y pidieron mayor atención ante el narcotráfico. Así, Fernández enumeró la resolución de la deuda que la Nación tenía con Santa Fe, obras como el tren y la hidrovía, y construcción de escuelas y rutas.
“Sin embargo, la lucha contra el crimen organizado, a pesar de los esfuerzos realizados, no ha alcanzado los resultados que esperábamos”, admitió el Presidente, quien, sin embargo, remarcó que “el crimen organizado no se desarrolla de un día para otro” y que para expandirse requiere tiempo para tomar territorios, reclutar sicarios, y cooptar voluntades en las Fuerzas de Seguridad, en la Justicia y también en la política. “Eso es lo que les garantiza su desarrollo, expansión y fundamentalmente su impunidad”, comentó.
“Los hechos y las imágenes de los últimos días dan cuenta de hasta dónde son capaces de llegar con sus ilícitos propósitos. Entiendo que Rosario nos necesita”, marcó el mandatario del Frente de Todos, quien aceptó que las fuerzas de seguridad presentes en la ciudad en este momento “son insuficientes para afrontar la solución del problema".
Además, sostuvo "vamos a ponerle fin a la violencia criminal de los sicarios. Ninguna red de mafiosos puede contra la fuerza de todo un pueblo unido en defensa de su tierra y de su vida en comunidad", dijo el Presidente en un mensaje grabado desde la residencia de Olivos.
"A quien resulte implicado con esas organizaciones, sea que lo haga activa o pasivamente, le caerá todo el peso de la ley. No aceptamos mezquindades ni especulaciones políticas", completó el Presidente.
Por último, Fernández dijo que "el sistema carcelario extremará la custodia contra los reclusos que han sido condenados y pretenden desde la misma cárcel seguir controlando sus objetivos criminales".
"Vamos a poner en el centro de la escena a la autoridad del Estado para devolverle a la ciudad su vida en comunidad", concluyó su mensaje.