"Estamos viendo cómo las deforestaciones, el daño al medio ambiente impacta en el ecosistema, eso genera estas sequías tan profundas, venimos trabajando con el ministro Juan Cabandié", dijo el martes Cafiero y advirtió que para el Gobierno nacional "es esencial la agenda ambiental y de desarrollo sostenible, la ley de humedales es parte de esto".
En declaraciones a A24.com, Viviana Di Marzio, directora de Flora y Fauna del Ministerio de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires, dijo que "la ley de humedales es una materia pendiente que tenemos para evitar el avance descontrolado de edificios en zonas que no son habitables y generan estos desequilibrios en el medio ambiente".
La funcionaria advirtió que desde el Gobierno bonaerense pidieron informes al municipio de Tigre y a la administración del Country privado Nordelta si se realizaron estudios previos no solo de impacto ambiental, sino también de impacto sobre la fauna y la flora antes de construir el emprendimietno urbano".
Di Marzio aseguró que "no es que los carpinchos invadieron zonas urbanas que le son ajenas. El Nordelta es parte de su hábitat natural".
¿Qué hará el Gobierno con los carpinchos?
A través de distintos organismos dependientes del Ministerio de Desarrollo Agrario y de medio ambiente, incluída la Dirección de Flora y Fauna, el gobierno de la provincia, mantuvo distintas reuniones con los vecinos de Nordelta, y realizaron distintos monitoreos.
Según confirmó Di Marzio a A24.com "hasta ahora no se detectó una superpoblación de carpinchos, por lo que vamos a seguir realizando estudios y mientras tanto, aconsejamos a los vecinos a tomar medidas de prevención y adaptarse para la convivencia con los animales silvestres".
“Hemos abordado el tema en otros barrios abiertos que están en contacto con la naturaleza por propia decisión, hay que integrarse de diferentes formas. En este caso tuvo mayor difusión por tratarse de Nordelta. Trabajamos en conjunto con el organismo para Desarrollo Hídrico Sostenible haciendo una evaluación y acompañando a la administración del country o quien tenga representatividad de los vecinos, porque dentro del mismo barrio hay distintas posiciones encontradas", dijo la funcionaria.
Di Marzio agregó que "los animales están dentro de su hábitat natural, en este caso son parte de la fauna autóctona, no están cometiendo invasión. Por eso, ante la conflictividad generada por los vecinos vamos a evaluar las herramientas de convivencia que permitan mantener un equilibrio, los animales tienen derecho estar en su hábitat natural", sostuvo la funcionaria.
Explicó que "son roedores, no comen carne, son herbívoros, son sociables y en muchos casos los vecinos los tratan como mascotas, pero después cuando se acercan a sus casas les molestan y generan temor en los chicos y las mascotas, porque por momentos pueden tornarse agresivos".
"Fueron los propios vecinos quienes pidieron la intervención del Gobierno porque decían que había superpoblación de animales de la fauna silvestre en el barrio, pero hicimos visitas técnicas y no detectamos superpoblación", añadió Di Marzio.
Por último, la funcionaria señaló que "son conflictos comunes, por eso, es necesario que al momento de llevar adelante emprendimientos de este tipo se incluyan evaluaciones de impacto ambiental, de la flora y la fauna, y valorar el rol y el impacto que tendrá la introducción del hombre en ese hábitat".
"La erradicación no es la solución, no lo quiere hacer el country por eso se están buscando alternativas. En caso de que en un futuro se confirme que hay superpoblación de carpinchos, una propuesta es buscarles un lugar más alejado del country", dijo la directora de Flora y Fauna de la provincia.