La mentirita

Cinco indicadores para entender por qué el gobierno porteño dice que la curva de contagios podría bajar la semana que viene

Ignacio Ferreiro
por Ignacio Ferreiro |
Cinco indicadores para entender por qué el gobierno porteño dice que la curva de contagios podría bajar la semana que viene
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Larreta y Quirós, protagonistas de la toma de decisiones para la estrategia sanitaria de la Ciudad (Foto: archivo).
Larreta y Quirós, protagonistas de la toma de decisiones para la estrategia sanitaria de la Ciudad (Foto: archivo).

El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, dijo que espera que la próxima semana empiece a bajar la curva de casos de Covid-19 en la Ciudad. Casos, muertes, ocupación de camas, hisopados y positividad: ¿Cuáles de estos datos ratifican o desmienten la hipótesis del gobierno?

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Casos confirmados

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Uno de los principales argumentos del gobierno porteño para avanzar con la apertura de actividades es el amesetamiento de los nuevos casos que se confirman en cada nuevo reporte. En los últimos días, los nuevos positivos fueron similares a los de hace tres semanas y la tendencia pareciera ser a la baja. Aunque esta podría deberse a las demoras propias de la carga manual de casos.

Más allá de los picos, el promedio de casos nuevos por día calculado para ventanas de 7 días muestra que se confirman cerca de 1100 casos por jornada. Es el mismo valor que se registró en la última semana de julio.

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Otra manera de analizar la velocidad con la que crecen (o decrecen) los contagios es con el factor de crecimiento. Es el resultado de la división entre los casos descubiertos en la última semana y los registrados en la anterior. Si esa cuenta resulta mayor a 1, entonces en la última semana se registraron más casos que en la anterior. Si es menor a 1, sucedió lo inverso: se registraron menos casos que en periodo previo.

En la Ciudad, el factor de crecimiento lleva un mes oscilando en valores cercanos a 1, según los datos del Ministerio de Salud de la Nación. En la última semana el factor de crecimiento fue 0,76, confirmando la desaceleración.

Sin embargo, se trata de un dato preliminar, ya que todavía pueden sumarse nuevos casos de los últimos días de la semana pasada.

Fallecimientos

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Similar a la tendencia registrada en la confirmación de nuevos casos, las muertes causadas por Covid-19 en la Ciudad de Buenos Aires no aumentan desde hace casi tres semanas. Desde finales de julio y hasta el 12 de agosto, cerca de 40 personas fallecen por día. Es el valor más alto desde el inicio de la serie, pero por primera vez se frenó el crecimiento de los decesos diarios.

Ocupación de las camas de terapia intensiva

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La ocupación de camas de terapia intensiva en el sector público de la Ciudad está lejos de ser tranquilizante. Hasta hace tan solo cuatro días, el 68% de las UTIs estaba ocupada; es el valor más alto desde junio desde el inicio de la pandemia. Ese porcentaje es un indicador de lo exigido que está el sistema sanitario porteño. Según el último reporte, hay 159 camas de terapia intensiva libres sobre un total de 450.

Donde sí se registró una caída fue en las camas leves. Un tercio están ocupadas, según los datos más recientes. Hace tres semanas, la ocupación alcanzaba a dos tercios del total de 5000 camas. Por último, las camas para pacientes en estado moderado no registraron una variación importante. Hace un mes y medio que la mitad de esas unidades están ocupadas.

Es importante aclarar que la Ciudad solo releva la ocupación de camas en el sector público y que no hay información disponible para el sector privado de la salud.

Hisopados

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Los hisopados que se realizan por día están en el nivel más alto desde marzo. Durante la última semana, se hisoparon en promedio cerca de 5000 personas por día. Hace un mes, esa cifra era de 3500, por lo que hubo un aumento del 42%. En el mismo período en la provincia de Buenos Aires los testeos aumentaron un 29%.

Otra variable que el Gobierno de la Ciudad mira con atención es la cantidad de tests realizados cada mil habitantes en la última semana. Según los datos más recientes de los reportes diarios, esa tasa llegó a 6,4 test por mil habitantes, el valor más alto del último mes. En julio, era de 4,8.

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Sin embargo, el crecimiento de los hisopados totales que se realizan en la Ciudad no tuvo correspondencia con lo que sucede en los barrios vulnerables. De hecho, en los últimos diez días se redujo un 25% los hisopados que se realizan en esos territorios a través del Plan Detectar.

En concreto, el 7 de agosto se habían realizado 450 hisopados, según el promedio diario de 7 días. Con los datos del reporte del 17 de agosto, el más reciente, ese mismo promedio se redujo a 330 tests por jornada.

Positividad

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La porción de tests que resultan positivos del total realizado está bajando, pero sigue por encima de los niveles recomendados por la OMS. A finales de julio, uno de cada dos testeos resultaba positivo. En la última semana, esa proporción bajó a 35%, lo que significa que uno de cada tres tests dio positivo.

La OMS estableció que la positividad es un parámetro a tener en cuenta para entender si hay que aumentar o reducir el testeo en una población. La organización recomienda que el índice esté entre el 10% y el 20%. Si está por debajo del 10%, se está testeando en exceso, malgastando recursos. Si está por encima del 20%, se está testeando poco.

Sin embargo, incluso la mayoría de los países desoyen la recomendación de eficiencia de la OMS y priorizan testear más aún cuando se vayan de esos márgenes. En Australia, por ejemplo, la positividad oscila el 0,4%. Es la estrategia que usan los países para salir más rápido de los confinamientos.