Junto con la caída en las ventas, el informe resalta el cambio en los medios de pago. “Esta dinámica sugiere que una proporción creciente de los hogares recurre al endeudamiento para afrontar consumos básicos mensuales, como alimentos, productos de higiene y artículos de primera necesidad”.
  Este comportamiento se da en un contexto de salarios que apenas superan la inflación y mayor carga de gastos fijos en los hogares. Aunque en el último tramo se redujo levemente el uso del crédito (del 46% al 45%), la tendencia general muestra un crecimiento significativo respecto del inicio del período analizado.
 También crece la morosidad
 Otro dato que refuerza el diagnóstico es el salto en la morosidad del crédito al consumo. “Desde el inicio de la gestión de Milei, el indicador aumentó 147%, al pasar de 2,5% a 6,2% del total del crédito al consumo en julio de 2025”, sostiene el informe.
 El análisis también descarta que el mayor uso de crédito obedezca a incentivos nuevos. “Las promociones asociadas a compras con tarjeta de crédito ya existían antes del inicio del gobierno de Milei”, recuerda el documento.
   En conjunto, estos datos muestran una pérdida sostenida de poder adquisitivo y un mercado interno debilitado. La posibilidad de una recuperación de la demanda, anticipada en informes previos, aparece cada vez más lejana.
 Desde el Centro RA concluyen que el consumo seguirá deprimido en los próximos meses. La combinación de endeudamiento creciente, caída de ingresos reales y señales débiles desde el gobierno alimenta un escenario de incertidumbre económica.