Las claves de la visita de la jefa del Comando Sur, Laura Richardson a la Casa Rosada, en medio de la tensión del gobierno de Javier Milei con China.
La jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson fue recibida en Casa Rosada en medio de negociaciones por la compra de aviones y un clima de tensión con China. Foto Ministerio de Defensa.
Aunque oficialmente el Gobierno argentino evita hablar del clima de tensión que genera la base espacial china en Neuquén, fuentes oficiales admitieron a A24.com que más allá de los avances en las relaciones con Estados Unidos, el gobierno analiza "pedir una inspección" a la base que operan militares chinos en una superficie de más de 200 hectáreas en la Patagonia.
En ese marco, desde el Gobierno admitieron que "se está trabajando para pedir una inspección si hace falta", tal como dejó entrever en declaraciones periodísticas el martes el ministro de Defensa, Luis Petri.
Otras fuentes de la Casa Rosada confirmaron a A24.com que el tema de la base espacial China "se tocó pero no fue central" en la cumbre encabezada por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse con los funcionarios norteamericanos. El Gobierno argentino le explicó a la jefa del Comando Sur que "está planeado organizar una visita a la base, que tiene como eje la investigación" espacial y se volvió a resaltar que "no hay militares en la misma".
El tema surgió en medio de la visita la influyente jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson, este miércoles en la Casa Rosada donde ambos gobiernos avanzaron en acuerdos de intercambio en materia de Defensa para avanzar en ejercicios militares y estrategias conjuntas en el marco de la inestabilidad política regional.
También se habló sobre la estrategia de Milei respecto del rol de las Fuerzas Armadas en seguridad interior y los proyectos de ley para modificar el rol en la lucha contra el narcotráfico.
Como gesto de apoyo al gobierno de Javier Milei, la administración de Joe Biden confirmó la donación de un avión Hércules C.130 y la visita de uno de los principales portaaviones nuclear norteamericano en mayo de este año.
Milei permaneció en la residencia de Olivos y no se sumó a las reuniones que protagonizaba este miércoles la jefa de las Fuerzas Armadas estadounidense con distintos ministros del Gobierno argentino.
En otro gesto de Joe Biden el vocero de Javier Milei, Manuel Adorni confirmó este miércoles que Estados Unidos ultima los detalles para enviar uno de sus más poderosos portaaviones a la región en mayo: el USS George Washington, el cuarto buque más importante de la Armada norteamericana.
Es el cuarto más importante de la flota de la Armada norteamericana. Se trata de un buque de propulsión nuclear que fue botado en julio de 1990, tiene un largo de más de 330 metros y un ancho de 76 metros. Cuenta con distintos sistemas de radar, una capacidad para albergar a 3200 tripulantes y 90 aviones y helicópteros.
Para que pueda realizar un ejercicio militar conjunto con un país extranjero o para que un barco de guerra amarre dentro del territorio argentino se necesita de la aprobación del Congreso, aunque por la falta de mayorías propias en el Congreso ambos gobiernos analizan la posibilidad de que el portaaviones navegue por la plataforma del mar argentino a una velocidad que respete las normas internacionales sin parar en ningún puerto local.
Luego de que el embajador de EE.UU. en Buenos Aires, Marc Stanley, planteara este fin de semana en declaraciones periodísticas la necesidad de hacer un control de las actividades militares del país asiático en Neuquén, en momentos de fuerte tensión geopolítica entre ambas potencias mundiales, el Gobierno argentino reconoció que evalúa la necesidad de pedir una inspección.
Consultados por A24.com, en la Casa Rosada destacaron dos cosas fundamentales: "La base está dentro de la CLTC (Agencia Nacional China de Lanzamiento, Seguimiento y Control General de Satélites) que es el equivalente a la NASA. Pero a diferencia de la NASA no está plenamente dividida respecto de las Fuerzas Armadas. Lo hicieron civil para poder firmar acuerdos con otros países".
"Toda la infraestructura espacial y el entrenamiento de pilotos forma parte de lo que es la infraestructura militar" de China, indican en el Gobierno argentino.
Richardson llegó minutos antes de las 15 a la Casa Rosada, acompañada por el embajador norteamericano Marc Stanley, para reunirse con el jefe de Gabinete, Nicolás Posse y el ministro de Defensa, Luis Petri, quien antes la había recibido para una extensa charla en el edificio Libertador.
En la previa a la visita a la Casa Rosada, la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos fue recibida por el ministro de Defensa, Luis Petri en el edificio Libertador, junto al jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas argentinas.
"No se habló ni mencionó siquiera la palabra China", dijeron fuentes oficiales ante la consulta de A24.com sobre los rumores sobre un pedido del gobierno norteamericano para que Argentina haga una inspección en la base espacial militar que China usufructúa en la provincia de Neuquén.
Según confirmaron fuentes oficiales a A24.com, además de recibir la donación del Gobierno norteamericano de un avión C-130, dialogaron sobre la cooperación entre ambos países en materia de equipamiento, los problemas que enfrenta la región y en lo cuales Argentina puede ayudar.
Además, se habló sobre la modernización legislativa en el ámbito de la Defensa, punto que tiene que ver con los proyectos que elabora el Poder Ejecutivo para modificar la Ley de Seguridad Interior que impide que las Fuerzas Armadas puedan intervenir en operativos de seguridad interior, como en los casos de narcotráfico.
Entre los temas planteados en el Ministerio de Defensa, se habló también sobre el tráfico ilegal de recursos naturales y la inestabilidad política de la región", relataron fuentes cercanas al ministro Petri.
