Casa Rosada

Elecciones 2021: ¿Alberto Fernández llamará a un acuerdo político el día después o es un operativo para "desdramatizar" el resultado?

En Casa Rosada dejan trascender que Alberto llamará a un acuerdo político el día después. ¿Cómo reaccionarán los distintos actores del Frente de Todos?
Stella Gárnica
por Stella Gárnica |
Alberto Fernández

Alberto Fernández, Cristina Fernández de Kirchner y Sergio Massa, las tres patas de la alianza del Gobierno que definirán cómo seguir después de las elecciones de este domingo.

La discusión no es sólo política sino económica. Hay dudas sobre cómo continuará el Gobierno después de las elecciones legislativas: si habrá nuevos cambios de gabinete y si pese a las críticas del kirchnerismo seguirán al frente de la Economía Martín Guzmán, Matías Kulfas y Mario Pesce como titular del Banco Central. Esa entidad tendrá un rol central la semana que viene para mantener en control al dólar y la inflación para la etapa que se viene. Todo dependerá del resultado y de acuerdo a eso, el oficialismo ya debate internamente tres posibles escenarios a partir del 15N.

Alberto Fernández convocará el lunes a un gran acuerdo político y social para debatir 10 políticas económicas y sociales con empresarios, sindicalistas, universidades y movimientos sociales en el marco del Consejo Económico y Social. Después enviará estas propuesta al Congreso para iniciar un diálogo con la oposición, bajo la forma de varios proyectos de ley, entre las que figura el presupuesto 2022 y un eventual programa económico consensuado con el FMI.

¿Qué escenarios debate el Frente de Todos para el 15N?

  1. Si el Gobierno logra dar vuelta la elección -es decir, revertir la derrota de casi 10 % a nivel nacional que sufrió en las PASO del 12 de septiembre- el presidente Alberto Fernández y el actual gabinete saldrían fortalecidos y sólo se discutiría cambios de sintonía fina en el Gabinete. Pero continuarían las cabezas de la mayoría de los ministerios, incluidos el jefe de Gabinete, Juan Manzur -que viajó a Tucumán y no estará el domingo en el búnker para esperar los resultados- y el de Economía, Martín Guzmán, que espera llegar a un acuerdo con el FMI entre enero y febrero próximo para evitar un default cuando venzan 19.000 millones de dólares de la deuda tomada por Mauricio Macri.
  2. En cambio, si el Frente de Todos solo logra el objetivo de mínima que se autoimpuso -achicar la brecha de las PASO frente a la opositora Juntos por el Cambio- los gobernadores, intendentes y gremios del PJ enrolados en la CGT y los movimientos sociales oficialistas rodearán al presidente Alberto Fernández para intentar fortalecerlo y reclamarán más participación en la toma de decisiones del Gobierno, con posibles cambios de gabinete. Por eso, la CGT y los movimientos sociales como el Evita y Barrios de Pie convocaron a una marcha de apoyo para el miércoles 17N (Día de la Militancia peronista) a Plaza de Mayo con el aval del Presidente. Pero en ese escenario de eventual derrota el peronismo más ortodoxo y la CGT reclamarán más poder en la toma de decisiones y buscarían desplazar al kirchnerismo del centro del poder, que quedaría en minoría en un eventual cambio de gabinete.
  3. Un tercer escenario sería una derrota abrumadora del Frente de Todos, por una diferencia mayor a los 10 puntos a nivel nacional que perdió en las PASO 2021, lo que llevaría a un escenario por ahora incierto en la coalición oficialista.

Algunos en la Casa Rosada no descartan fuertes internas entre dos polos fuertes: por un lado el peronismo ortodoxo de la mano de Gobernadores e intendentes y CGT que buscarán armar un nuevo gobierno, con Alberto Fernández muy debilitado pero manteniéndose en el cargo.

En el polo opuesto al peronismo ortodoxo con Alberto y los gobernadores a la cabeza, está el kirchnerismo puro que ante una derrota abrumadora del Frente de Todos, responsabilizarían a Alberto Fernández y a los ministros de Economía, Martín Guzmán y de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, dos hombres cercanos al presidente a los que Cristina Kirchner ya había pedido sus cabezas antes de las PASO, por la crisis económica y la incapacidad de controlar la inflación.

Una alternativa que analizarían desde el kirchnerismo es relanzar al Gobierno creando un superministerio de Economía que fusione varias carteras como producción, en el cual se menciona como posible ministro al titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, con el eventual alejamiento de Juan Manzur y un enroque del ministro del Interior, Wado De Pedro, que responde a Cristina, como jefe de Gabinete.

La Casa Rosada y el operativo "desdramatizar"

"Hay que desdramatizar el resultado de las elecciones", dijo el jueves el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, uno de los jefes territoriales del PJ que promueve un avance de los gobernadores en la toma de decisiones del Gobierno, tras reunirse el jueves sobre el filo de la veda electoral, con el presidente Alberto Fernández en la Casa Rosada.

Uñac anticipó la postura de los gobernadores para el día después: "El lunes todos, el gobierno nacional, los gobernadores y los intendentes vamos a estar trabajando y gobernando", dijo a periodistas en Casa Rosada horas antes del cierre de campaña, y agregó: "hablamos con el presidente y si el llama a un acuerdo político todos los gobernadores e intendentes lo vamos a acompañar, esperemos que también se sume la oposición". Lo hizo después de llevar a Casa Rosada a un grupo empresario que anunció inversión de 4200 millones de dólares en una nueva mina de cobre en San Juan.

Con el operativo "desdramatizar" había salido primero la nueva portavoz del Gobierno en su ya habitual conferencia de prensa el jueves a la mañana, Gabriela Cerruti: "El lunes el Gobierno va a estar gobernando, esperemos contar voto a voto y que sea un día normal", dijo. Y anticipó el llamado a un acuerdo económico social del presidente y no descartó una conferencia de prensa el mismo 15N en la Casa Rosada.

Desde el Gobierno insistieron hasta el cansancio que no va a haber devaluación pese a las presiones del FMI para que redefinan las variables macroeconómicas con una devaluación del peso que algunos ubican en cerca del 30%.

La inseguridad también podría llevarse algún ministro. Sergio Berni no descartó renunciar en medio del trágico asesinato del kiosquero de Ramos Mejía que puso al problema de la inseguridad al tope de las demandas insatisfechas junto con la inflación, la pobreza y el desempleo.

Alberto Fernández y el discurso que prepara para el 15N

En medio de este panorama “complejo”, como lo definen en la Casa Rosada, Alberto Fernández evaluaba el fin de semana qué decir cuando el domingo se suba al escenario del búnker del Frente de Todos. Algo de eso ya anticipó la portavoz Gabriela Cerruti y desde el entorno más cercano al Presidente el jueves: “Vamos a contar hasta el último voto”.

La mirada estará puesta el domingo en cómo reaccionan los distintos actores internos y externos. Y la capacidad de mantener el control que logre el Presidente. De repetirse los pronósticos de las PASO, el lunes quedará en la memoria como el "15N", una nueva etapa en la que el peronismo intentará reciclarse para debatir la posibilidad de permanecer en el poder en 2023.