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En el cierre de la cumbre de Puebla, Cristina Kirchner fue ovacionada y advirtió: "Hay que tener coraje para..."

La cumbre del Grupo de Puebla, volvió a mostrar el quiebre entre albertismo y kirchnerismo. Con Alberto Fernández a miles de kilómetros en Chaco, el kirchnerismo hizo una nueva demostración de fuerza y pidió por "Cristina presidenta".
Stella Gárnica
por Stella Gárnica |
Cristina Kirchner cerró el encuentro del Grupo de Puebla ovacionada bajo el cántico: Cristina Presidenta. REcibió el apoyo de ex presidentes de España y de la región que denunciaron un lawfare en su contra. Foto: Grupo de Puebla.

Cristina Kirchner cerró el encuentro del Grupo de Puebla ovacionada bajo el cántico: "Cristina Presidenta". REcibió el apoyo de ex presidentes de España y de la región que denunciaron un lawfare en su contra. Foto: Grupo de Puebla.

Con Alberto Fernández a miles de kilómetros de distancia, en Chaco, Cristina Kirchner cerró el III Foro de Derechos Humanos del Grupo de Puebla y recibió fuerte apoyo de expresidentes progresistas de España y de la región, que denunciaron que es víctima de persecución político judicial (lawfare) como parte de un plan orquestado desde Estados Unidos por el neoliberalismo para sacarla igual que sucedió antes en Brasil con Lula Da Silva y Dilma Rouself en Brasil, Evo Morales en Bolivia o Fernando Lugo (Paraguay) para evitar que sea candidata.

En ese clima dejó abierta esa posibilidad esta noche en un acto en el Centro Cultural Kirchner, cuando dijo: "Hay que tener coraje para volver a construir el país que una vez tuvimos, porque ya lo hicimos", en referencia a los más de 12 años de las presidencias de Néstor Kirchner y sus dos mandatos entre 2003 y 2015.

Con más de un hora de demora, la vicepresidenta Cristina Kirchner cerró la cumbre del Grupo de Puebla, con un discurso de fuerte tono de defensa de las gestiones kirchenristas, críticas a los golpes de estado militares. Comparó la situación entre "los partidos militares del Plan Cóndor" con "el lawfare y el partido judicial" que según se coincidió en el evento, la tiene ahora como "objetivo" para proscribirla.

En ese marco, Cristina Kirchner se mostró en un estrado del Salón Ballena del CCK, rodeada por los expresidentes de España, José Luis Rodríguez Zapatero, de Ecuador, Rafael Correa, de Colombia, Ernesto Samper, y dirigentes progresistas de Chile como Marco Enríquez Ominami (Chile) y la brasileña Giselle Ricobom y el jurista español Baltasar Garzón.

Cristina Kirchner grupo de puebla, la vicepresidenta fue ovacionada y le pidieron que sea candidata a presidenta pero no lo confirmó. Foto Senado..jfif

Recibió un fuerte apoyo regional en el marco de las causas judiciales en su contra y sus denuncias sobre persecución política-judicial que busca sacarla de la escena política electoral de cara a la sucesión presidencial.

Pero a cumbre realizada en el Centro Cultural Kirchner volvió a mostrar a un oficialista Frente de Todos dividido, con el presidente Alberto Fernández ausente, por un acto paralelo en la provincia de Chaco.

Al encuentro internacional de respaldo a Cristina Fernández de Kirchner bajo el título: “Voluntad popular y democracia: Del partido militar al partido judicial, las amenazas a la democracia", no contó con ningún ministro ni dirigente que responde directamente a Alberto Fernández.

En cambio, por el kirchnerismo estuvieron sentados en primera fila los ministros de Interior, Wado De Pedro, de Justicia, Martín Soria, de Defensa, Jorge Taiana, el viceministro de Justicia, Martín Mena, el procurador del Tesoro, Carlos Zannini, el gobernador Axel Kicillof y varios de sus ministros; el titular de la AFIP, Carlos Castagneto, el senador Oscar Parrilli y el diputado Eduardo Valdez. En cambio no estuvo Máximo Kirchner.

También estuvieron los intendentes kirchneristas de La Matanza, Fernando Espinoza, Mayra Mendoza (Quilmes), Juan Ustarroz (Mercedes) Mario Secco (Ensenada) Federico Achaval (Pilar).

Por la mañana Alberto Fernández recibió en Casa Rosada a los expresidentes y organizadores del foro internacional del Grupo de Puebla, ante quienes anunció el regreso de Argentina a la UNASUR. En los 35 minutos de discurso, Cristina no mencionó a Alberto Fernández ni una sola vez; al contrario, habló de la crisis económica que hay que revertir.

En cambio, hizo un extenso repaso de la historia de los golpes de estado cívico militar en la región, y la implementación de políticas neoliberales, pasando por los golpes de 1976, la caída de la Alianza en 2001 y la "reconstrucción de la autoridad presidencial, del Congreso y de la justicia" cuando Néstor Kirchner asumió en 2003 con el 22 % de los votos.

"El golpe del '76 destruye el patrón de acumulación económica y cultural de la Argentina del trabajo. Si estudiabas y laburabas, te iba bien. Yo soy hija de esa época, hija de un trabajador que llego a presidenta", dijo y remarcó que cuando dejó el gobierno a manos de Mauricio macri en 2015, "los salarios fueron los más altos en dólares" de la historia y los ingresos del trabajador ocupaban el 51% del PBI".

"Parte de esta persecución es porque yo represento ese espacio, se encarnizan conmigo no solo por la economía sino por lo que pudimos reconstruir en derechos humanos, no nos van a perdonar nunca eso", señaló.

Y agregó: "El problema es cuando uno decide jugar del lado de intereses del pueblo y grandes mayorías. Este neoliberalismo desaparece el estado y aparece este otro fenómeno narcotráfico ocupa lugar del estado. Si queremos luchar contra el narcotráfico primero tenemos luchar contra el sistema financiero", culminó casi en tono de campaña.

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