A la espera de Cristina
Los cuatro fueron hoy los protagonistas de la audiencia ante el Tribunal Oral Federal número seis, que ratificó que el próximo miércoles y de manera presencial declarará la víctima del atentado, Cristina Kirchner.
La presidenta del tribunal, Sabrina Namer, anunció que previo a la declaración autorizará a la prensa a ingresar a la sala de audiencias para tomar registros gráficos de la expresidenta y luego procederá a escucharla en el que, en principio, será el único testimonio de la jornada.
En la audiencia de hoy, Corona -quien es un histórico trabajador de Radio Nacional-, describió que en el tumulto que se originó después del fallido asesinato pateó accidentalmente el arma que se le había caído a Sabag Montiel.
“Pateé algo, miré para abajo y me di cuenta que era el arma. Le dije a uno que estaba a mi lado y empezó a gritar a 'la cápsula'. Yo no sabía qué era 'la cápsula'”, el nombre que tiene el círculo más cercano de la custodia que rodea a la expresidenta.
“La cápsula, la cápsula”
Fernando Sabag Montiel declaró en el juicio por el atentado contra Cristina Kirchner: "Es un acto de justicia"
Fernando Sabag Montiel declaró en el juicio por el atentado contra Cristina Kirchner: "Es un acto de justicia". (Foto: Reuters)
Corona contó que uno de los custodios le pidió que “no dijera nada” sobre el arma, que no se moviera del lugar y convocó a otros custodios para que procedieran al secuestro.
Ángel Maffulo, en tanto, declaró desde el juzgado federal de Bariloche por videoconferencia. Es el dueño del ejemplar del libro “Sinceramente” que Cristina Kirchner se aprestaba a autografiar y que cayó al piso cuando se produjo el ataque.
“Si el disparo hubiera salido tal vez yo no estaría aquí, ni siquiera estaría vivo. (…) Quizá me hubiera disparado a mí también”, reflexionó, tras confesar que quedó “en estado de shock” tras el atentado.
El último en declarar fue el fotoperiodista Ricardo Ceppi, quien recorrió la escena del intento de homicidio dos horas antes de que ocurriera, registrando imágenes del operativo de seguridad montado por la Policía de la Ciudad sobre los manifestantes que acudían al lugar.
Todos los testigos coincidieron en la “sensación” sobre una supuesta voluntad de la custodia de Cristina Kirchner para ocultar el ataque.
A esa actitud atribuyeron el pedido a un grupo de militantes que habían filmado con un teléfono celular el momento preciso en que se produjo el disparo, pero cuando se percataron que el episodio ya había trascendido a la prensa y que había otras filmaciones circulando desistieron de mantener esa reserva.