Judiciales

La insólita pelea entre la jueza del Caso Loan y el jefe del gremio de los judiciales

Cristina Pozzer Penzo denunció que Julio Piumato la hostiliza y reclamó la exclusión de dos testigos en el proceso de juicio político. ¿Cuánto influye la tirantez en que Loan, después de tres meses, continúe desaparecido?

Néstor Espósito
por Néstor Espósito |
La insólita pelea entre la jueza del Caso Loan y el jefe del gremio de los judiciales

El conflicto entre la jueza que investiga la aún irresuelta desaparición del niño correntino Loan Danilo Peña y el líder del sindicato de los trabajadores judiciales escaló hasta el Consejo de la Magistratura. Allí está radicado un pedido de juicio político formulado por la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN), el gremio que lidera Julio Piumato. Sostiene que la jueza Cristina Pozzer Penzo incurrió cuanto menos en tratos hostiles contra sus propios empleados, vulnerando sus derechos laborales desde una posición de poder jerárquico.

Pozzer Penzo afronta el proceso de juicio político y en ese contexto, el martes 17 de septiembre (dentro de una semana) están llamados a declarar cinco testigos. Entre ellos figuran los dos a los que la jueza denunció penalmente y que en un fallo de primera instancia resultaron sobreseídos por inexistencia de delito.

La magistrada le pidió a la Comisión de Acusación del Consejo (que tiene facultades para impulsar la suspensión y el sometimiento a Jury de destitución) que excluya a ambos testigos que –suponen– declararán en su contra. "Vengo a advertir ante esa Comisión la incompatibilidad existente que impide que los testigos Héctor Daniel Montiel y Enzo Cáceres presten declaración en el marco de estas actuaciones, y en consecuencia solicito que se excluya su convocatoria de las medidas probatorias a producir en el presente expediente".

Pozzer Penzo denunció: "Cáceres desde hace tiempo ha ejercido un permanente hostigamiento sindical y una persecución en mi contra por razones de género, haciéndome padecer calumnias, injurias y un trato degradante por su parte, y Montiel, en el marco de su desempeño en el Juzgado Federal de Goya, ha tomado posturas contrarias y negativas al debido cumplimiento de sus funciones, lo cual no solo podría suponer la comisión de un delito, sino que además me ha generado graves perjuicios, tanto en lo personal como en lo profesional".

Al menos tres razones

La jueza detalló que hay al menos tres causales que, según su apreciación, impiden la declaración de ambos testigos. Están contenidas en el artículo 441 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, que establece que "aunque las partes no lo pidan, los testigos serán siempre preguntados (...) si tiene interés directo o indirecto en el pleito; si es amigo íntimo o enemigo; si es dependiente, acreedor o deudor de alguno de los litigantes, o si tiene algún otro género de relación con ellos”.

Según Pozzer Penzo, el hostigamiento por el que acusa a Piumato es una de las razones por las cuales no puede trabajar con la tranquilidad que necesita para avanzar en la investigación sobre la desaparición de Loan. Esa es una de las razones que explican que el niño lleve un centenar de días ausente, sin una prueba concreta que indique qué ocurrió con él, pese a que hay siete detenidos y aún no está claro por qué delitos.

La descalificación de los dos testigos, quienes ya fueron admitidos por el consejero instructor, Héctor Recalde, sostiene que "no resulta genuino ni transparente el testimonio que podrían brindar Montiel y Cáceres, ya que declararían en el marco de una causa en la que se investiga y juzga a quien los ha denunciado por haber llevado a cabo irregularidades en el marco de sus puestos laborales en el Juzgado Federal de Goya".

"No solo han llevado a cabo actitudes perjudiciales en mi contra, sino que además se encuentran denunciados por la suscripta, y si bien el Juzgado Federal Nro. 2 de Corrientes recientemente resolvió desestimar la instrucción, dicha decisión se encuentra recurrida por esta magistrada, y el recurso de apelación ha sido concedido por el Juzgado y elevado a la Cámara Federal de Apelaciones de Corrientes", destaca la presentación de la jueza, a la que tuvo acceso A24.com.

Poner un freno

La abogada de la jueza, la penalista Mariana Barbitta, difundió un comunicado en el que afirmó que "desde hace dos meses, el Dr. Julio Piumato, Secretario General de la UEJN, en conjunto con ese gremio, han estado realizando manifestaciones públicas que se han caracterizado por su violencia y hostigamiento contra la Jueza Federal Dra. Cristina Pozzer Penzo. Ante ello, (…) se solicitó a los Consejeros que intimen al Dr. Piumato y al sindicato a cesar su actitud. La Comisión elevó la consulta al Plenario del Consejo a los fines de que indiquen si pueden extenderse sus facultades para intervenir de la manera solicitada por la Jueza".

El Consejo solo está facultado para evaluar la conducta de los jueces. Pero, al mismo tiempo, también debe garantizarles el derecho a la defensa. La situación es inédita: nunca antes en su historia el Consejo recibió un planteo de esta naturaleza.

La abogada Barbitta afirmó que "varios/as Consejeros/as intervienen visualizando el hostigamiento y la presión ejercida en distintos casos por parte de la UEJN, aclarando que el 'escrache' no es la vía". La situación, añadió, debe ser tratada en la Comisión de Labor para que "se reglamente la forma de actuación del Consejo ante estas situaciones, ya que ponen en grave riesgo el correcto procedimiento de los expedientes".