Polémica

Viajes al exterior: Javier Milei aseguró que la medida "va a destruir la inversión y se van a fugar capitales"

El diputado nacional electo por Avanza Libertad sostuvo que la decisión del Gobierno "es una devaluación sin tocar el tipo de cambio".
Viajes al exterior: Javier Milei aseguró que la medida va a destruir la inversión y se van a fugar capitales.

Viajes al exterior: Javier Milei aseguró que la medida "va a destruir la inversión y se van a fugar capitales".

Para Milei, esta medida refleja "la falta de dólares" del Banco Central, y explicó que "las reservas internacionales de libre disponibilidad, las netas, están en casi un terreno perforando lo negativo".

En esa línea, el dirigente libertario aseguró que la medida "es una devaluación sin tocar el tipo de cambio".

Este jueves, el Banco Central prohibió la venta de pasajes, alojamientos o servicios en el exterior en cuotas con tarjeta de crédito, una medida que generó un fuerte repudio en un sector de la sociedad y de la dirigencia política, lo que provocó que el Gobierno tuviera que salir a fundamentar la medida esta mañana.

¿Qué piensa Javier Milei?

"Si seguimos con este modelo de déficit fiscal financiado con emisión monetaria, lo que se hace es alimentar el exceso de demanda de divisas", enfatizó el legislador electo, en declaraciones mediáticas. A su criterio, "cuando se meten más controles, ese mayor exceso de demanda que se va a generar en el mercado de divisas tiene más consecuencias en otras partes de la economía".

A su vez, describió que "en el mercado de bonos se va a tener un exceso de ofertas por todos lados pero en el mercado de bonos significa altas tasas de interés y, por eso, el riesgo país en promedio está arriba de 1700 puntos". Y agregó que la decisión "impacta en la generación de trabajo, en el salario real, más pobres, más indigentes".

"Es una olla a presión porque no se lo puede aguantar socialmente. Las restricciones generan un malestar en el funcionamiento de la economía que la hacen invivible y por lo tanto explota", alertó.

Según su criterio, "la única salida es hacer un programa de ajuste y poner las cuentas en orden. El punto es que cuando se carece de reputación, el programa no es creíble y termina siendo recesivo".

Para que ese programa "sea lo menos doloroso posible -en un contexto de un Presidente que no le cree nadie, porque a la mañana dice una cosa, a la tarde otra y a la noche otra- es haciendo que el ajuste recaiga sobre el sector público", evaluó.