La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) ha anunciado un importante aumento del 26,8% en las jubilaciones para el régimen especial de docentes no universitarios a partir de septiembre.
La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) ha anunciado un importante aumento del 26,8% en las jubilaciones para el régimen especial de docentes no universitarios a partir de septiembre.
Este reajuste representa el tercer incremento del año y beneficia a más de 186.000 jubilados que se retiraron bajo el decreto 137 de 2005.
Las actualizaciones en las jubilaciones se realizan trimestralmente y están basadas en el índice de salarios del sector, conocido como Remuneración Imponible Promedio Docente (Ripdoc). Con el aumento de septiembre, los jubilados del régimen especial experimentarán una subida nominal acumulada del 127,5%, que incluye los reajustes de marzo, junio y septiembre.
Por otro lado, los jubilados del sistema nacional de docentes universitarios también recibirán una actualización, aunque con una variación diferente. Según Anses, estos jubilados verán un aumento del 22,4% en sus haberes, acumulando un incremento total del 104,9% en lo que va del año, basado en el índice Ripdun.
A través de las resoluciones 587/2024 y 588/2024 publicadas en el Boletín Oficial, el Gobierno nacional oficializó el aumento del 4,03% para los jubilados de ANSESque se aplicará en septiembre, y elevará el haber mínimo a $225.454.
El porcentaje, que se basa en la inflación de dos meses atrás, se le aplicará además a pensionados, beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y así también a aquellos titulares de otras asignaciones familiares.
En cuanto a la Asignación Universal por Hijo (AUH), el monto total se ajustará a $84.275, aunque el importe efectivo a cobrar en septiembre será de $67.420, frente a los $64.808 que se están pagando actualmente.
Por otro lado, la Prestación Básica Universal (PBU) pasará a ser de $107.291, mientras que la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) subirá a $187.632, reflejando también el reajuste por inflación. Estos aumentos buscan paliar los efectos de la crisis económica, pero son insuficientes para neutralizar por completo el impacto de la alta inflación.
A pesar del aumento programado, una de las grandes incógnitas sigue siendo si el Gobierno continuará aplicando el bono de $70.000, que había sido otorgado como una ayuda complementaria a los jubilados que perciben el haber mínimo.