La hermana de Dominick le dijo a NBC New York que su hermano estaba jugando cuando «el matón lo llamó por su nombre y lo atrajo a la vuelta de la esquina». «En cuestión de segundos, volvió gritando y diciendo: 'Mami, me prendieron fuego'», dijo la hermana, Kayla Deegan, según la cadena de noticias.
Los informes preliminares indican que hasta cuatro niños desatendidos fueron vistos jugando con nafta y encendiendo objetos el día del suceso, dijo la Oficina de Emergencias y Seguridad Nacional de Bridgeport en un comunicado.
Dominick fue llevado a la unidad de quemados del Hospital de Bridgeport poco antes de las 16 del domingo. Las fotos del niño muestran su rostro casi completamente envuelto en vendajes. Las partes de su cara que son visibles están hinchadas.