Esta comedia con Diego Peretti y Carla Peterson en Netflix te va a conquistar desde el primer minuto. La película que es una joya del humor familiar.
Netflix: Diego Peretti y Carla Peterson arrasan con la comedia argentina que está causando sensación.
Netflix continúa apostando por producciones que conectan directamente con el corazón del público. En su vasto catálogo aparece una gema que logra destacarse entre dramas oscuros y thrillers internacionales. Este es el caso de "Mamá se fue de viaje", una película que ha vuelto a cobrar protagonismo gracias a la dupla explosiva de Diego Peretti y Carla Peterson.
Desde su estreno, la película cosechó elogios por su capacidad para mezclar humor cotidiano con crítica social, sin perder de vista el tono liviano que la vuelve ideal para disfrutar en familia. La historia se apoya en el caos que genera este cambio de roles, y logra que las situaciones más comunes del día a día se conviertan en escenas desopilantes y cargadas de ternura.
Netflix ha sabido rescatar este tipo de contenidos que en su momento tuvieron una fuerte recepción en cines, y ahora los potencia con el alcance global de la plataforma. Mamá se fue de viaje no sólo revive como un título popular dentro del catálogo, sino que también se transforma en una de las comedias familiares más reproducidas en la región.
Mamá se fue de viaje no es una comedia más: es una sátira aguda, ligera y entrañable sobre la vida doméstica y el reparto de roles dentro de la familia. Peretti, en el papel de Víctor, un padre absorbido por su rutina laboral, se ve forzado a asumir tareas del hogar cuando Vera, su esposa (interpretada con frescura y carisma por Peterson), decide tomarse unos días de vacaciones en solitario. Lo que en principio parece una escapada temporal, se convierte en una experiencia reveladora tanto para él como para sus hijos.
El timing cómico de Diego Peretti, conocido por su versatilidad y su talento para el drama y la risa, es uno de los pilares fundamentales del film. Su personaje transita por todas las emociones: frustración, desconcierto, ternura, hasta una progresiva y necesaria transformación personal. Peretti logra que cada torpeza doméstica se convierta en una reflexión encubierta sobre el trabajo invisible que muchas veces recae únicamente sobre las mujeres.
Por su parte, Carla Peterson ofrece una interpretación equilibrada, que contrasta con la locura en casa. Su personaje no sólo encarna la figura materna tradicional, sino también la mujer que se permite descansar, delegar y alejarse de la rutina sin culpa. Esa decisión, que da inicio al conflicto narrativo, también representa un acto de liberación.
Más allá del tono humorístico, el guion de Mamá se fue de viaje funciona como espejo de una realidad que muchas familias viven a diario. La sobrecarga de tareas, la falta de reconocimiento, la desconexión emocional entre padres e hijos, y el mito del padre proveedor que no se involucra en lo doméstico, son temas que la película aborda con sutileza y sin moralejas forzadas.
Aunque fue estrenada hace ya varios años, el renovado interés por Mamá se fue de viaje tiene que ver con algo más que la nostalgia. En tiempos donde la discusión sobre los roles familiares, el reparto equitativo de tareas de los padres está más presente que nunca, esta comedia resulta más actual que en su año de lanzamiento.
El contexto pandémico, que obligó a muchas familias a reorganizarse en sus casas, volvió evidente lo que la película ya había señalado con humor: que criar, educar, ordenar, cocinar, acompañar, también es trabajo, aunque muchas veces no sea remunerado ni valorado. En ese sentido, Netflix ha vuelto a poner en el radar un contenido que permite reír y pensar al mismo tiempo.
Ideal para un maratón familiar, esta cinta invita a compartir miradas entre padres, madres, hijas e hijos, y descubrir que todos tienen algo que aprender del otro. La clave está en saber mirar.